El 19 de abril, como todos los años, se volverá a conmemorar la Semana de los Pueblos Originarios Americanos, una ocasión en la que referentes guaraníes de Misiones se reunirán a debatir puntos fundamentales para mejorar la calidad de vida en las aldeas mbya que, se sabe, viven prácticamente en las mismas condiciones desde hace años.
A pesar que los pendientes del Estado van desde el acceso a servicios básicos como el agua potable, la salud y la vivienda digna; uno de los puntos a tratarse con más énfasis será la deuda eterna de garantizar una educación de calidad, teniendo en cuenta que “los niños mbya también tienen derecho a ser atendidos como parte de la sociedad argentina”, como expresó el representante del Consejo Educativo Autónomo de los Pueblos Indígenas (CEAPI), Jorge Acosta a PRIMERA EDICIÓN.
Si bien ninguno de los pedidos es de nueva data, uno de los que se volverá a tratar en particular es el de incorporar una oficina de coordinación guaraní dentro del Consejo General de Educación (CGE) con la finalidad de tener un lugar específico donde plasmar la necesidad en lo que respecta a la educación intercultural bilingüe. Respecto a eso, “nosotros vemos que, si no tenemos esa parte fundamental que es una dirección dentro del CGE para la atención de las escuelas bilingües iniciales, primarias, secundarias, vamos a seguir muy atrasados como siempre, es como si depositáramos nuestras solicitudes en el aire”, indicó Acosta.
Se trata de un pedido que surgió ya el año pasado en asamblea con los caciques y docentes indígenas en Pozo Azul, que llegó al presidente del CGE, Alberto “Colita” Galarza, pero que aún no tiene respuesta, “mientras que eso no salga, no se resuelven las necesidades reales que estamos atravesando, pero tenemos fe que en algún momento pueda salir”, explicó.
Infraestructura: una espera eterna
En este contexto, si se tuviera a disposición una oficina en el CGE donde asentar las necesidades y reclamos, uno de los más preponderantes sería que se inicie con los trabajos del Programa de Fortalecimiento de Escuelas Interculturales Bilingües, lanzado a mediados del año pasado por el vicegobernador Carlos Arce, el ministro de Educación Miguel Sedoff y el presidente del CGE Alberto “Colita” Galarza, que prometía una inversión en la infraestructura de las 104 escuelas bilingües de Misiones, y del cual todavía no hay novedades.
“En aquel momento nosotros habíamos presentado un listado de necesidades, pero no se llegó a ejecutar nada, tampoco recibimos un mensaje en el cual se mencione cuál es el plan a ejecutar”, explicó el referente mbya.
Mientras tanto, las escuelas siguen en condiciones precarias, “algunas siguen sin techo o sin paredes para dar clases. Necesitamos infraestructura o refacción para que los niños puedan sentirse mejor para estudiar. Somos nexo comunidad y Estado, por eso tenemos que decir la verdad, creemos que el Estado lo sabe muy bien pero, aun así, no se llega a nada y es lamentable”, indicó Acosta.
Por si fuera poco, tampoco hay un material bibliográfico acorde a la educación bilingüe, ni llegan a las comunidades los recursos didácticos que envía la Nación como “Los libros para aprender”, es decir, los docentes y auxiliares se las arreglan para enseñar, prácticamente sin elementos o con aquellos, producto de donaciones. “No nos llegan los materiales didácticos, no llegan los útiles, no llega nada, es necesario que también reconozcan los derechos de los niños mbya”, señaló.
Auxiliares docentes sin cobrar
Como cuarto punto, pero no menos urgente, tratarán la situación de los auxiliares docentes de las aldeas guaraníes que cobran de forma irregular, “un 50% de ellos está en planta permanente, pero el otro 50%, que serían alrededor de 90 docentes cobra un estímulo económico de un Programa Socioeducativo nacional cada dos meses, algo lamentable”, explicó el referente.
Este mismo año, a pesar de haber transcurrido cuatro meses, siguen sin cobrar aquellos que dependen de los fondos que envía la Nación, “algo que me preocupa como referente, porque se me vuelcan a mí, como si yo tuviera responsabilidad. Nos indigna, los docentes indígenas también tienen derecho a reclamar, a recibir su remuneración como corresponde porque también son parte de una sociedad educativa y cumplen su responsabilidad de enseñar como cualquier docente”, continuó, “no debería pasar esto, es algo que ya lo habíamos planteado en una reunión con el presidente del CGE donde le volvimos a solicitar la creación de horas”.
En ese marco, ya el año pasado propusieron como solución, “que al menos un 15 o 20% de nuestros auxiliares sea nombrado este año y otro tanto el próximo año, para que no force mucho, pero que se empiece, siempre con ayuda de los referentes indígenas para nombrar donde realmente más se necesita”.
Finalmente, Acosta remarcó “a pesar de todo, respeto al Estado y a los demás caciques, ya que cada comunidad tiene su necesidad particular, pero la educación es algo que nos atraviesa a todos”.