Un vehículo casi totalmente sumergido en el río, en la zona de la bajada de lanchas ubicada en la avenida Antártida Argentina (continuación Tomas Guido) y al lado de un conocido club de pesca y náutica, fue el alerta que recibió la Prefectura Naval Argentina en horas del mediodía de este domingo. Cuando realizaban las tareas de rescate, notaron que estaba el cuerpo sin vida de un hombre en la cabina. Las causas del hecho son materia de investigación.
Ariel Andrés Horacio Arteaga (37), quien según fuentes consultadas se desempeñaría como empleado del Poder Judicial provincial, fue la víctima de lo que en principio se considera fue un siniestro vial. Sin embargo aún restaban varias medidas de prueba para establecer la mecánica de lo sucedido.
Al respecto, la policía revisaba las cámaras de seguridad existentes en la zona, para hallar indicios acerca de las circunstancias en las cuales la Ford Ecosport presuntamente conducida por la víctima ingresaba a las aguas del río Paraná. Además, se aguardaba el resultado de la autopsia para determinar la causa de muerte. En principio el cuerpo no presentaba lesiones que pudieran aventurar alguna situación de violencia previa. También realizaban averiguaciones para poder establecer cuáles fueron sus últimos movimientos antes que lo hallaran muerto.
Este Diario pudo saber que el hombre había estado reunido con amigos entre la noche y la madrugada del sábado, en un conocido restaurant de esta capital.
Preocupación
En las primeras horas de la mañana, alguien de su entorno familiar íntimo empezó a contactar sus conocidos e inclusive habría dado el alerta a la policía, porque el hombre no había regresado a su domicilio ni tampoco respondía mensajes ni llamados.
Fortuitamente, alrededor de las 8.30 de la mañana y sin saberlo, alguien se topó con la camioneta de la víctima. Una persona sobre la cual no trascendió su nombre, se dirigió a la misma bajada de lanchas con su embarcación. Cuando se disponía a ingresarla al agua se dio cuenta que el bote había tocado algo. Salió a dar un largo paseo y cuando regresó se dispuso a averiguar qué era lo que estaba bajo el agua. Ahí se dio cuenta que era el techo de un vehículo hundido.
Llamó a la Prefectura y junto con efectivos de la seccional Segunda y distintas Direcciones de la UR-I, comenzaron las tareas para sacar el automóvil que estaba a unos 15 metros de la orilla. En principio los buzos navales hallaron un cuerpo en el habitáculo.
Hallaron también su celular, el cual iba ser peritado en caso que fuera posible su activación, puesto que había estado varias horas en el agua.
Las actuaciones fueron supervisadas por el Juez de Instrucción 6, Walter Ricardo Balor, y el fiscal René Germán Casals.
Trabajaron en el lugar el Sub Director General de Seguridad, Comisario General Oscar Antonio Bigalki, el Jefe de Unidad Regional Uno, Comisario Mayor Roberto Carlos Franco, Comisario. Cristian Runke, Jefe de Dependencia y efectivos de la Dirección Policía Científica.