En las últimas horas detuvieron en Garupá a parte de un banda que golpeaba y asaltaba a hombres luego de pactar un encuentro amoroso por las redes sociales. En el lugar, las víctimas eran emboscadas por un grupo de encapuchados que se llevaban todo. Detuvieron a una joven de 18 y a un cómplice de 21 años.
El hecho se conoció en las últimas horas. En el marco de recorridas de prevención de delitos penales y debido a los últimos hechos de robos calificados cometidos durante las últimas semanas en la zona del barrio Piedras Blancas de Garupá, los efectivos dieron con los dos sospechosos.
Alrededor de las 22 del sábado, los policías detectaron a tres personas en un trillo ubicado en la calle Hugo de Carril. Se trataba de dos hombres y una mujer, quienes al notar la presencia policial intentaron escapar ingresando a una casa de madera lindante a una construcción de material. Ante al imprevisto, la mujer arrojó a la vereda un celular color negro marca Motorola, con la pantalla trincada.
Una vez interceptada e identificada, la joven de 18 años no supo justificar su accionar y quedó bajo arresto, al mismo tiempo que se secuestró el teléfono móvil que será peritado por Cibercrimen.
Asimismo, los dos cómplices que la acompañaban huyeron por un descampado. Tras un amplio rastrillaje policial en colaboración con vecinos de la zona, lograron detener a un joven de 21 años quien junto a la joven fueron alojados en la sede jurisdiccional a disposición del Juzgado de Instrucción 7 de Posadas.
Un negocio aceitado
Tras la detención de los dos jóvenes, los efectivos de la comisaría local realizaron averiguaciones y constataron que los sospechosos estarían involucrados en varios hechos delictivos vinculados a robo calificado y llevados a cabo de similar forma. Varios damnificados lo denunciaron durante el mes de marzo.
La sindicada, a través de Facebook interactuaba con estos, los convencía para encontrarse y compartir unos tragos, al momento de verse, los llevaba hasta un trillo en donde los esperaban otros jóvenes encapuchados, quienes los golpeaban y les robaban todo lo que podían.
Las pesquisas continúan, a fin de atrapar al resto de los involucrados, a quienes la policía ya los habría identificado.