Un bebé de un año y cuatro meses murió en Brasilia tras ser diagnosticado con coronavirus y a la espera de una cama de cuidados intensivos, que están completamente ocupadas en la capital brasileña.
Según la Secretaría de Salud de Brasilia, el bebé había ingresado a un hospital público el pasado lunes con diagnóstico positivo y su familia estaba a la espera de que fuera trasladado a una unidad de terapia intensiva. Sin embargo, su cuadro pulmonar se agravó y acabó sufriendo “una parada cardiorrespiratoria”.
Las unidades de terapia intensiva (UTI) de los hospitales de Brasilia tienen unos niveles de ocupación que, en las últimas dos semanas, han variado entre el 95 % y el 100 %, debido al mayor avance de la variante ómicron del coronavirus, que comenzó a propagarse con más fuerza en el país desde principios de enero.
Según admitieron las propias autoridades, cerca del 90 % de los pacientes hospitalizados por COVID no se ha vacunado o no tienen la pauta completa, pese a que el programa de inmunización comenzó hace más de un año.
Fuente: 26 Noticias