En la tarde del pasado jueves 6 de enero, efectivos de la Policía federal en Puerto Iguazú detectaron la presencia de un vehículo sospechoso estacionado en proximidades de una empresa de envío de encomiendas de esa ciudad.
Es que los federales notaron que había varios bultos que a simple vista parecían envueltos con una especie de tela arpillera, lo cual llamó su atención, y además, al acercarse, el hombre que manipulaba esos paquetes –oriundo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires– evidenció cierto nerviosismo.
Así pudieron verificar que los bultos tenían como destino Capital Federal, pero el individuo no contaba con ningún tipo de documentación para verificar su procedencia.
Al estar presumiblemente ante un delito de contrabando, los uniformados se comunicaron con el Juzgado Federal de Eldorado, que dispuso la interdicción de la mercadería.
Al abrir los bultos este lunes, se confirmó que en su interior había más de 7.000 lentes de sol, todos de procedencia extranjera y sin ningún tipo de documentación legal, cuyo valor estimado rondaría el millón y medio de pesos.
Todo ese material fue secuestrado y el individuo que lo tenía en su poder quedó supeditado a la causa por contrabando.