Un automóvil se incendió en una estación de servicio de Puerto Iguazú ubicada sobre ruta nacional 12, a pocos metros del Centro de Frontera, en la cabecera del puente internacional. El hecho ocurrió este lunes pasadas las 22 horas de ayer, lunes 27 de diciembre.
El vehículo en cuestión, un Fiat con patente argentina, poseía un tanque con doble fondo aparentemente destinado a la posterior reventa del combustible. De momento no ha trascendido la existencia de personas heridas producto del incidente.
En los últimas semanas se ha intensificado el movimiento en las estaciones de servicios de la Capital del Turismo, ya que la diferencia de precios respecto a los vecinos países motivó el cruce de extranjeros para abastecerse de combustibles, en muchas ocasiones con el fin de luego vender de forma ilegal el mismo.
Esto ha llevado a que Concejo Deliberante de Iguazú aprobara recientemente una ordenanza que estipula sanciones para los surtidores que comercializan gasolina a automóviles con tanque adulterado.
Un hecho de similares características ocurrió el pasado 14 de diciembre en Bernardo de Irigoyen, cuando un automóvil dedicado a la venta informal de combustibles explotó en inmediaciones al casco urbano de ese municipio. Ese mismo día se produjo también un derrame de combustible en una de las casillas del Paso Fronterizo Posadas-Encarnación.
A raíz de esos hechos, la junta Interna de la Dirección Nacional de Migraciones Misiones emitió un comunicado manifestando su preocupación por la seguridad de los trabajadores de frontera y la ciudadanía por las situaciones de venta de combustible y su tráfico entre fronteras.
“Nos encontramos en estado de alerta debido a que el peligro que reviste el traslado de materiales altamente inflamables como la nafta en condiciones inadecuadas convierte a nuestros Pasos en lugares en los que, de no mediar algún tipo de respuesta, tarde o temprano sucederá una tragedia”, sostenía Migraciones.
El traslado de combustible a través de las fronteras no se realiza solamente en los tanques de vehículos, sino que suele ser llevado bidones plásticos en los motores de vehículos. Este traslado no solo resulta peligroso por las posibilidades de ignición, sino que la inhalación de los vapores de estos productos también es altamente nociva para la salud.