Se concretó en Oberá la compactación de los cascos inservibles que habían sido sacados de circulación en ocasión del curso para conductores de motocicletas que llevó adelante la Asociación de Motociclistas de Misiones (AMM) en conjunto con la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), entidad que además entregó a cambio un casco de alta visibilidad, homologado y con visor solar.
La actividad se concretó el último jueves, con el apoyo de la Comuna local, y marcó el cierre de todo el proceso que abarcó desde la charla de concientización teórico-práctica, pasando por la compactación y el reciclado de los cascos inservibles para otros fines.
El titular de la entidad que nuclea a los motociclistas misioneros, Alejandro Melgarejo, explicó a PRIMERA EDICIÓN que “fue sorprendente ver el nivel de deterioro que presentaban estos cascos que fueron entregados por los participantes del curso, siendo el casco el elemento que proporciona cobertura y seguridad a una de las partes vitales del conductor de motocicleta como lo es su cabeza”.
Agregó que “dichos cascos eran utilizados principalmente para evitar recibir una multa pero no consideraban en absoluto el nivel de seguridad que proporcionaban, y esto sucede principalmente por la falta de información al respecto. La simple exigencia de usar algo en la cabeza mientras vas en moto ha generado este fenómeno, conocido como falsa sensación de seguridad, que lo brinda un casco ‘trucho’ o en mal estado y que le puede costar la vida a cientos de comprovincianos todos los años o genera una secuela permanente con consecuencias catastróficas en las familias misioneras”.
Melgarejo remarcó que “desde Motociclistas Misioneros Asociados, luchamos contra la falta de educación en materia de conducción, conocimiento del funcionamiento y cuidado de las motos, reglamentaciones vigentes, lo cual es gravísimo y esto lo decimos fundamentando nuestras palabras en los estudios llevados adelante por la ANSV durante los cursos dictados por nuestros instructores a lo largo de todo el 2021 en diferentes localidades de misioneras”.
Sacar de circulación estos cascos usados “es de suma importancia debido a que de los estudios realizados se desprende que gran cantidad de los asistentes compró su casco usado, muy deteriorado, sin visera y con el único propósito de evitar ser multado. De lo contrario estos cascajos volverían a las calles en la cabeza de algún motociclista inexperto y vialmente mal educado por parte de quienes le otorgaron la habilitación para conducir un vehículo de alto riesgo como lo es una motocicleta”, manifestó.
En un hecho sin precedentes Misiones recientemente recibió 500 cascos que tienen como destino a quienes tomen el Curso de Conducción Segura de Motocicletas y “estas acciones son contundentes, generan un piso de conductores visibles, educados desde la práctica y con mayores probabilidades de evitar o sobrevivir a un siniestro. Este es el desafío, continuar en esta senda, que más municipios se sumen a recibir este curso y salvar vidas de motociclistas en toda la provincia”.
Celular sí, pero casco “ni”
Melgarejo, por otra parte, comentó una de las situaciones particulares vividas durante los distintos cursos dictados a lo largo del año y dijo que “no resulta un dato menor que los participantes de los cursos tengan un celular en sus bolsillos que muchas veces triplica el costo de un casco nuevo de buena calidad”.
En el mismo sentido, el también instructor avalado por la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) remarcó que “el tema del celular y el casco habla que no es una cuestión de dinero sino de prioridades y falta de información. Este es un factor común en todas las localidades misioneras a las que brindamos los cursos de capacitación por lo que entendemos es imperativo seguir este camino de reeducar a los actuales usuarios de las vías mientras se genera un semillero de buenos conductores desde la educación vial en los colegios”.