Los empleados de la Dirección Nacional de Migraciones se reunieron en asamblea para repudiar lo que denominaron “una reducción salarial enmascarada en un aumento”.
Según señalaron desde ATE Migraciones que “ante los anuncios nacionales de recomposición salarial y con la premisa de que los estatales le ganen a la inflación se había informado que el valor de las horas electorales iban a incrementarse y esto iba a representar la tan anhelada recomposición de los salarios”.
Sin embargo, agregaron que “la sorpresa se dio cuando los empleados notaron que si bien aumentaron el valor de la unidad disminuyeron la cantidad de las mismas representando un insignificante aumento que en algunos casos fue de 500 pesos”.
Ante está situación, señalaron que “vemos cómo a través de intrincadas maniobras administrativas los funcionarios a cargo del organismo han jugado con la esperanza de muchos de los trabajadores porque hace unas semanas anunciaban que los empleados iban a poder recomponer sus haberes y que una de las maneras iba a ser a través de los adicionales de horas electorales, lo cual sería un gran alivio al bolsillo tan castigado de los estatales que en la actualidad no supera la canasta básica, pero ese anuncio se vio frustrado al ver los recibos de sueldos”.
De está forma, los empleados autoconvocados indicaron que “un empleado de migraciones cobraba alrededor de 66 horas electorales y cada hora electoral equivalía a $157, y que el anuncio llevaba a $296 el adicional, lo cual evidenciaba una recomposición del salario; pero nunca se dijo que se reducirían a 43 horas electorales lo cual representó una verdadera burla para los empleados que durante toda la pandemia estuvieron trabajando y que jamás fueron reconocidos por esto”.
En este mismo marco, los empleados autoconvocados decidieron firmar un petitorio para revertir esta situación, pero se han manifestado a favor de iniciar acciones de fuerza a partir de la semana próxima si no son escuchados sus reclamos.