El Hogar Santa Teresa alberga a personas con discapacidades y enfrenta, como todos, dificultades económicas para solventar los gastos diarios del Hogar que alberga hoy 65 internos. Por eso idearon una forma de generar un ingreso que es vendiendo plantines del vivero del Hogar que los mismos internos mantienen y cultivan.
Con la ayuda invaluable de algunos internos que pueden realizar alguna actividad, más allá de su discapacidad motriz, la coordinadora Mercedes Corró está al frente del proyecto que genera un pequeño ingreso para solventar gastos, pero también es terapéutico ya que muchos de los internos que colaboran se sienten valorados por su aporte.
“Hacemos plantines de muchas especies y los vendemos, tanto flores como aromáticas, arbustos, bulbos y con ese ingreso ayudamos en algo a las 65 personas que están alojadas en el Hogar”, explicó Corró.
Por otra parte, destacó el apoyo de algunas personas como Juan Carlos, un joven que trabajaba en la plantación de tabaco y que por un accidente de motocicleta quedó en silla de ruedas y con problemas neurológicos. También Carlitos, que hace mucho colabora con el jardín y planta lo que Juan Carlos genera como plantines, al igual que María que estaba en el jardín y ahora en el taller.
“Es terapéutico el contacto con la tierra y las plantas, les hace bien. Tenemos un espacio de 20 x 10 metros y empezamos hace muy poco, hace meses, con lo que teníamos y ya avanzamos mucho. Trabajamos tres veces por semana, la gente puede venir a comprar de 8 a 11 los lunes, miércoles y viernes, además de conocer el Jardín Bíblico. También pueden contribuir con planteras, latas o bidones que nos sirva para hacer más mudas”, indicó.