El sureño estado brasileño de Rio Grande do Sul confirmó ayer lunes la transmisión comunitaria de la variante Delta del coronavirus, considerada como la más contagiosa de las conocidas, lo que podría poner en alerta a la Argentina y Uruguay por tratarse de una región fronteriza a estos países.
El Centro Estadual de Vigilancia en Salud de Rio Grande do Sul informó en un comunicado que “el primer caso de transmisión comunitaria se da en la ciudad de Nova Bassano, en una persona que viajó a Rio de Janeiro”.
Los especialistas hablan de “transmisión comunitaria” cuando ya no es posible atribuir el origen concreto del contagio.
En Rio Grande do Sul hay otros tres casos de infección por la cepa Delta, en la ciudad de Gramado, pero estos “poseen vínculo y contrajeron COVID-19 en el municipio”, precisó el centro de vigilancia, citado por la agencia de noticias Sputnik.
De momento, el estado de Rio de Janeiro es el que tiene mayor número de casos del temido patógeno que está causando estragos en varios países, incluso varios que parecían tener controlado el flagelo.
Hasta el 19 de este mes, la fecha con los datos más recientes, se contabilizaron en Río de Janeiro 74 del total de 97 casos de esta mutación notificados en el país, y también se reportaron cuatro muertes, según datos del Ministerio de Salud.
Brasil es el tercer país más afectado por la pandemia, detrás de Estados Unidos y la India, con 19,7 millones de infectados y 550.000 muertes.
Sinopharm pide autorización
El laboratorio chino Sinopharm pidió usar su vacuna contra el COVID-19 en Brasil, según informó este lunes la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa).
En un comunicado, este organismo estatal informó que recibió “petición de autorización temporal de uso de emergencia para la vacuna contra el COVID de la empresa Sinopharm”. La petición fue presentada por la empresa Blau Farmacéutica, representante del laboratorio chino en Brasil.
La vacuna no se testó previamente en Brasil, pero en mayo fue aprobada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y ya se aplica en varios países.
La Anvisa tendrá ahora un plazo máximo de 30 días para evaluar la documentación técnica y decidir si aprueba o no el uso de esta vacuna en el país sudamericano.
Investigaciones judiciales
Las autoridades de 11 estados de Brasil investigan casi 30.000 casos en los que se produjeron irregularidades en el plan de inmunización contra el coronavirus y se les aplicó una tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus.
Al menos 29.570 personas obtuvieron un tercer refuerzo del fármaco, mientras el que el 45% de la población brasileña solo tuvo acceso a la primera dosis, estimó la Universidad de Alagoas sobre la base de las denuncias que se realizaron en las diferentes fiscalías del país.