La cochinilla es un insecto plaga de la agricultura que se alimenta de la savia de las plantas, tanto a campo como en la huerta.
Entre los diversos tipos, las siguientes especies son las más comunes: Cochinilla algodonosa; también llamada cochinilla blanca o cotonet, y cuyo nombre científico es Planococcus citri, es una de las más extendidas. Es muy llamativa dado su color blanco algodón.
Cochinilla algodonosa de las raíces; a diferencia del cotonet, esta variedad de cochinilla ataca las raíces de las plantas.
Cochinilla de la humedad; es una variedad muy inofensiva, ya que no ataca a las plantas. Es el que se conoce popularmente como bicho bolita en Argentina, bicho bola en España, o chanchito de tierra en Chile, aunque el nombre científico es Armadillidium opacum. En cualquier caso, como mucho puede dañar los brotes o planteles, pero no a las plantas ya crecidas.
Cochinilla parda; esta variedad o tipo de cochinilla se llama científicamente Coccus hesperidium. Suele afectar a las plantas de interior y a los arbustos frutales.
Cochinilla blanda; la cochinilla del limonero, como se la llama a veces, es muy común en plantas como el laurel y árboles como el limonero. Se alimentan sobre todo de los tallos, las hojas y las ramas de las plantas y árboles.
Cómo detectar
Por ello, desde infocampo.com.ar recordaron que detectar la cochinilla a tiempo es importante, ya que cuanto antes se la detecte más rápido se podrá hacer algo para acabar con la plaga.
Suele ser un insecto que se desarrolla y reproduce a una gran velocidad, así que es importante revisar cada pocos días las partes interiores de las plantas, hojas o tallos, para ver que no esté campando a sus anchas.
Son fáciles de ver a simple vista. Otra forma de detectarlas es porque las hojas comienzan a marchitarse sin motivo aparente. Esto se debe a que el parásito consume la savia de su interior.
Métodos efectivos y naturales
Hay muchas maneras efectivas de eliminar a las cochinillas de las plantas, ya sean estas ornamentales de interior o exterior, o plantas comestibles y de la huerta.
A continuación se detallan tres que se pusieron en práctica y se sabe que son altamente efectivas, además de ser completamente inofensivas para la salud, para otros insectos o animales y para las plantas.
Tratamientos para eliminar la cochinilla algodonosa o blanca: uno de los métodos más efectivos es con la mezcla de aceite de neem y jabón potásico.
Este tratamiento es muy eficaz, ya que el jabón potásico ayuda a mantener el neem en el agua más tiempo y el neem es un potente insecticida. El tratamiento se puede hacer tanto en el regado como en las hojas con un pulverizador.
Cómo eliminar la cochinilla de las chumberas con un insecticida natural: para la mayoría de las cochinillas puede utilizarse un insecticida casero natural que también sirve como fungicida y repelente con alta efectividad.
Ingredientes necesarios: 5 dientes de ajo, 250 ml de alcohol, 250 ml de agua, un poco de jabón biodegradable líquido (o jabón rayado), un pulverizador vacío. Mezclar los dientes de ajo pelados con los 250 ml de alcohol y dejarlos macerar tapados en un bote de cristal durante 24 horas.
Al día siguiente juntar la mezcla con el agua y un chorro del jabón biodegradable en un pulverizador, volver a mezclar bien y estará listo para utilizarse para eliminar la cochinilla de las chumberas o de cualquier tipo de planta.
Tratamiento para la cochinilla infalible: aplicar tierra de diatomeas natural. Este polvo blanco se extrae de unos fósiles de algas marinas.
Además de ser efectivo con las plagas como la cochinilla, es un nutriente para nuestras plantas. Esta se esparce por la tierra y las plantas y combate las plagas.
Es importante no confundirla con la tierra de diatomeas que se utiliza para limpieza, que es tóxica para plantas y mascotas.