En solo tres décadas, la vida en la tierra cambiará de manera irreversible. Es la advertencia del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas que elaboró un informe preliminar sobre las devastadores consecuencias que tendrá el efecto invernadero y será presentado oficialmente en febrero de 2022; pero ya anticiparon las principales consecuencias que afectaran la vida humana y planetaria.
La magnitud de las amenazas ambientales que se avecinan es tal que, para el IPCC, “los umbrales peligrosos están más cerca de lo que se pensaba, y las consecuencias nefastas derivadas de décadas de contaminación por carbono desenfrenada ya son inevitables a corto plazo”.
Las olas de calor en el mundo serán probablemente cada vez más mortíferas al superar los límites de resistencia del organismo humano, según el borrador del grupo de expertos sobre el cambio climático de la ONU consultado por la AFP.
Sobrevivir
No se trata tanto del calor extremo en términos de temperaturas elevadas, cada vez más frecuentes, sino de su combinación con una humedad alta. Este fenómeno llamado “temperatura húmeda” se mide con un termómetro de bulbo húmedo y se expresa con el valor TW.
En concreto, sirve para determinar la humedad relativa ambiente y sus posibilidades de evaporación. Puesto que el cuerpo humano no puede perder calor si la TW exterior es superior a la suya, los científicos coinciden en que el ser humano no puede sobrevivir mucho tiempo por encima de 35 ºTW.
“Hay tanta humedad en el aire que la sudoración no permite rebajar la temperatura excesiva. Tras una media docena de horas, si no hay manera de refrescarse artificialmente, los órganos empezarán a fallar hasta producirse la muerte”, según Colin Raymond, investigador de la NASA.
Raymond es el autor principal de un estudio publicado en mayo de 2020 que identificó dos lugares en el Golfo donde ya se alcanzaron los 35 ºTW. Hasta entonces los científicos creían que esta temperatura no se daría hasta mediados de siglo.
300.000 muertos
Entre las regiones del mundo más expuestas, figuran el sur y el sureste de Asia, el Golfo, el golfo de México y algunas regiones del continente africano.
En 2015, dos canículas de alrededor 30 ºTW dejaron más de 4.000 muertos en India y Pakistán. En cambio, la temperatura húmeda permaneció bajo ese techo durante la gran canícula que dejó más de 50.000 muertos en Europa en 2003.
Según el estudio de Colin Raymond, la frecuencia de estos picos de calor húmeda se más que duplicó en el mundo desde 1979 y las temperaturas “superarán frecuentemente 35 ºTW” en varias partes del mundo si el calentamiento mundial alcanza +2,5 ºC.
Futuro caliente
Desde fines del siglo pasado, los gobiernos intentan llegar a acuerdos para frenar el cambio climático. Pero nunca se logran los objetivos planteados.
En 1997, el “Protocolo de Kioto” planteaba una meta pequeña para poder ser cumplida: reducir en un 5% las emisiones de gases contaminantes para el año 2005. Sin embargo, la meta debió correrse hasta 2020 porque no se logró.
En tanto, el “Acuerdo de París” sobre el cambio climático realizado en 2015 fijó el objetivo de mantener el calentamiento por debajo de +2 ºC y a ser posible a +1,5 ºC, respecto a la era preindustrial. Lo contrario desataría una serie de cambios en gran parte irreversible sobre el clima en la Tierra.
Pero, las trayectorias actuales superan ampliamente estas metas. El calor excesivo ya provocó estragos, según dos estudios recientes.
El plazo del “Acuerdo de París” rige hasta 2050, sin embargo la actualización de las mediciones plantean otro horizonte.Mas preocupante y mucho más cercano es un aumento promedio de la temperatura de sólo 1,5% para iniciar estos cambios climáticos en nuestro planeta.
Esa es la conclusión actualizada del informe que destaca que en los próximos 30 años ya tendríamos consecuencias directas de estas dramáticas modificaciones, que afectarán la vida de la especie humana.
La advertencia es aun más preocupante. Alguna de esas transformaciones ya son inexorables. Más allá de cumplir con los objetivos previstos.
El calentamiento provocado por la actividad humana llegó en 2017 a aproximadamente 1 °C con respecto a los niveles preindustriales.
Al ritmo actual, el aumento de las temperaturas globales llegará a 1,5 °C en torno a 2040. La trayectoria de 1,5 °C representada aquí implica disminuciones en las emisiones que comienzan inmediatamente, y emisiones de CO2 que se igualan a cero en 2055.
Nuevos Problemas
1. Sequías extensas que agravarán la escasez de agua y la malnutrición hasta provocar los éxodos de personas y la extinción de especies.
2. El hambre, la falta de agua y las enfermedades afectarán a decenas de millones de personas adicionales en las próximas décadas.
3. En el otro extremo, inundaciones repetidas y a gran escala en las ciudades costeras. Muchas de ellas se volverán inhabitables en vastas áreas.
4. Las olas de calor en el mundo serán probablemente cada vez más mortíferas al superar los límites de resistencia del organismo humano.
5. Cambios en el Ártico. La región que se calienta tres veces más rápido que la media mundial podría desaparecer, erradicando el modo de vida de los pueblos de la zona.
6. Pérdidas económicas súbitas y repetidas en los sistemas de producción alimentaria (agricultura, ganadería y pesca).
Conclusión I
Si el calentamiento global se limita a 1,5 °C en lugar de 2 °C, los impactos en los ecosistemas terrestres, costeros y de agua dulce serán menores y que se conservarán más servicios ecosistémicos para los seres humanos.
1 ºC
El calentamiento provocado por la actividad humana llegó en 2017 a casi 1 °C con respecto a los niveles preindustriales.
Conclusión II
Los riesgos relacionados con el clima para la salud, los medios de subsistencia, la seguridad alimentaria, el suministro de agua, la seguridad humana y el crecimiento económico aumenten con un calentamiento global de 1,5 °C.