En la semana que transcurrió, el Gobierno dio a conocer el índice de desocupación nacional durante el primer trimestre del presente año. La tasa fue del 10,2%, lo que, técnicamente, representó una baja de 0,8 puntos porcentuales respecto de diciembre último.
La cifra, sin embargo, oculta un crítico contexto que deja de lado y fuera de la medición a miles y miles de argentinos que dejaron de buscar empleo frente a la imposibilidad de conseguirlo. El primer año pandémico dejó secuelas tremendas que se disiparán con los años y con mucho esfuerzo por parte de todos.
Otro dato revelador es que si bien el desempleo del primer trimestre es apenas inferior al registrado en el mismo período del año pasado (10,4%), antes de la llegada del coronavirus al país, se ubica aún por encima de los valores de finales de 2019, cuando la desocupación fue del 8,9%.
Otro de los contextos que contiene la medición y que pocos profundizan es que el desempleo es mayor entre las mujeres.
El flagelo alcanza al 12,3% de esa parte de la población económicamente activa en relación al 8,5% de los varones. En buena medida el fenómeno se explica en los cambios que se produjeron en el funcionamiento de muchos hogares por la pandemia. Pero sería necio dejar de observar que el problema es histórico y que solucionarlo está llevando más tiempo del que debería llevar.
También se puede desmenuzar que, del total de trabajadores ocupados, el 71,8% son asalariados, de los cuales el 32,4% no tiene descuento jubilatorio. Por su parte, el 24,4% de los ocupados son trabajadores por cuenta propia; el 3,1%, patrones; y el 0,7%, trabajadores familiares sin remuneración.
Rumbo a las elecciones, el Gobierno comenzó con la venta de expectativas intentando buscar el vaso medio lleno a cualquier dato estadístico. Técnicamente algunos indicadores le dan la razón, pero es en los matices que la verdad encuentra a millones de argentinos en la misma o peor situación que el año pasado.
El dilema sigue siendo si lo importante es lo que está en la superficie o si lo es la cuestión de fondo.