Las familias varadas en una oficina de Aduanas del lado de Argentina desde hace más de una semana están preparando, en tanto, un nuevo expediente para apelar ante la Cámara Federal el rechazo al recurso de amparo conocido ayer, solicitado con los fines de que los dejen trasponer el Centro de Frontera.
“Tenemos 48 horas para responder, por ello estamos trabajando con pruebas”, fue la respuesta de Francisco Rosales, uno de los varados y vocero del grupo conformado por seis adultos y seis niños que se encuentran viviendo “en situación de vulnerabilidad y riesgo” en un salón del que no pueden salir hasta que se determine qué van a hacer con ellos.
Como otra medida, para acompañar el pedido desesperado para poder moverse en el país, los varados también recurrieron al Ministerio Pupilar del Obispado de la diócesis de Posadas para que intervengan como mediadores. Consultada al respecto de estas familias, la jefa de Migraciones del Paraguay, María de los Ángeles Arriola, contó “yo estuve en Buenos Aires cuando esto estaba ocurriendo y nos referimos a ellos en la reunión”.
“Me los nombró como ejemplo de que las medidas en la frontera son tan firmes que ‘ni a nuestros compatriotas podemos dejar entrar’, dándonos a entender que ninguno de nuestros compatriotas podría hacerlo”. En cuanto a si las familias podrían volver a Paraguay, como último recurso, Arriola aseguró que sí.