Ahora, mucha gente se pregunta hoy en día: “¿Puedo ser feliz en medio de una crisis?”. En primer lugar es preciso comprender que no logramos la felicidad mediante pensamientos o repeticiones.
¿Cómo logramos ser felices?
Fundamentalmente tomando las mejores decisiones, adoptando buenas actitudes y accionando de acuerdo a lo anterior. Comparto a continuación cuatro ideas sobre lo que significa ser feliz:
1. Soy feliz cuando soy capaz de darme cuenta de qué cosas me hacen bien y qué cosas me hacen daño.
Esto es posible únicamente si me amo a mí mismo de manera equilibrada, lo cual me conduce a respetarme y cuidarme como lo hago con otros.
2. Soy feliz cuando me tomo tiempo para trabajar para construir mi vida.
Mucha gente vive tan absorbida en sus muchas ocupaciones y responsabilidades (trabajo, estudio, familia, etc.), que se olvidan de sí mismos. Y siempre dejan para más adelante aquello que podría traer bienestar a sus vidas. No procrastines, no te coloques en último lugar. Tómate cada día un tiempo para pensar en qué es lo que necesitás y querés de verdad. Tal actitud te permitirá construir una vida feliz, pase lo que pase afuera.
3. Soy feliz cuando decido disfrutar el presente sin olvidarme del futuro.
Hay personas que tienen la creencia, tal vez por vivencias difíciles de su infancia, que están en este mundo para sufrir. Como resultado se desconectan por completo del placer. Los seres humanos fuimos amorosamente diseñados por un Creador para disfrutar de vidas plenas, para cumplir sueños, para compartir con otros. Pero el placer que te permitís disfrutar en el momento actual siempre debería adquirir un significado en tu mañana. Esto implica que lo que decidas disfrutar hoy no te traiga consecuencias negativas en tu mañana.
4. Soy feliz cuando reconozco el valor que tengo por el solo hecho de ser y no por tener o hacer.
¿Conocés tu valor? Muchos ricos y famosos que admiramos parecen tenerlo todo, pero en el fondo y aunque no lo reconozcan, no logran ser verdaderamente felices. Esto sucede cuando tengamos lo que tengamos y hagamos lo que hagamos, tenemos muy en claro quiénes somos y por qué estamos aquí. Nunca confundas tu “ser” con tu “hacer” o tu “tener”.
Entonces, ¿cómo hacemos para ser un poco más felices cada día, aun cuando atravesemos épocas difíciles como las que vivimos actualmente a nivel mundial?
Hay tres elementos que no deberían faltar en nuestra vida y son:
a. Gratitud.
b. Rituales.
c. Propósito.
Desarrollemos el hábito de ser agradecidos en todo aunque nuestras circunstancias no sean perfectas o ideales. Dicha actitud amplifica nuestro bienestar.
Procurémonos la felicidad a diario practicando “rituales” que variarán según la persona: un buen libro, una linda película, una rica comida, una charla inspiradora, etc. Y sobre todo busquemos conectar con el “por qué nací”. Descubrir esto nos llena de plenitud y satisfacción.