El sangriento ataque de un joven de 20 años a su amigo de 19 ocurrido entre los últimos minutos del lunes y madrugada del martes en Posadas, pero que recorre toda la provincia con comentarios y especulaciones, volvió ayer a sumar detalles que enmarcan lo sucedido con extrema violencia.
Manuel Sánchez, como lo adelantó ayer este Diario, prestó declaración ante el juez de Instrucción 2, Juan Manuel Monte, y apuntó como su único agresor a Santiago Darío Negrete (20) hijo de un reconocido empresario del rubro gastronómico y diversión de Posadas.
Según fuentes consultadas, señaló de manera clara y directa a su amigo. Aseveró que primero le disparó dentro de su automóvil Volkswagen Voyage y falló y el segundo balazo (calibre 22) le impactó en el rostro, pómulo derecho y continuó con estocadas de cuchillo y en medio de la reyerta ya en el suelo luego de chocar un poste de luz, se le rompió la hoja del arma blanca de tanto impactar contra la mano derecha de la víctima que se defendía como un gato acorralado. Pero que tampoco el joven Negrete, siempre según el relato de la víctima, desistió de su intento de ultimarlo y con las manos intentó estrangularlo.
Tampoco lo consiguió y entre los gritos de vecinos testigos del hecho, sobre la calle Chubut y Perito Moreno, buscó darse a la fuga. Esta reacción acabó a los pocos segundos porque en el cruce de la avenida Monteagudo fue atrapado por una patrulla de la comisaría Tercera que se dirigía hacia la zona del alerta.
Sánchez ante el juez instructor también descartó la participación en el ataque de otras personas. Le manifestó, desde su cama en el hospital Madariaga, que se había encontrado pocas cuadras antes con Negrete y que este subió al auto y segundos después desató la discusión y ataque.
No habría ahondado Sánchez en más detalles sobre el motivo y circunstancias del encuentro, detalles que se aguardan surgirán del celular secuestrado al presunto agresor.
La declaración de la víctima fue tomada por la comisión judicial encabezada por Monte y una policial de la Unidad Regional 1, comisaría Tercera.
Horas después, a las 8 de ayer en la seccional mencionada se presentó el magistrado de turno y encabezó la pericia de la Policía Científica al VW Voyage secuestrado. La requisa dio resultado positivo y fue hallado el segundo casquillo de la pistola calibre 22 utilizada para atacar a Sánchez.
Esta evidencia sería determinante para la imputación al joven detenido. Ya que mañana será llevado indagatoria judicial, bajo una provisoria pero firme sospecha de que no se le escapó el disparo, no fue un accidente y se apunta a un intento por matar, con presunta premeditación, alevosía y ensañamiento.
Se baraja que se abstenga de responder, derecho que le comprende, pero que no le facilitaría una excarcelación inmediata, por varios puntos a tener en cuenta: la instrucción de la causa es incipiente aún, restan pruebas por colectarse y resultados e informes periciales por completarse. Además en libertad existe el riesgo de interferencia del sospechoso sobre los testigos y ante la gravedad del delito puesto a investigar, el riesgo de fuga es latente y no se suplanta o morigera alegando arraigo o buena conducta, mucho menos una caución real.
Encuadre legal
De acuerdo al Código Penal Argentino, el delito de “tentativa” está previsto en el artículo 42: “El que con el fin de cometer un delito determinado comienza su ejecución, pero no lo consuma por circunstancias ajenas a su voluntad, sufrirá las penas determinadas en el artículo 44 (…) La pena que correspondería al agente, si hubiere consumado el delito, se disminuirá de un tercio a la mitad.
Si la pena fuere de reclusión perpetua, la pena de la tentativa será de 15 a 20 años. Si la pena fuese de prisión perpetua, la de tentativa será prisión de 10 a 15 años”.