Clotilde Mercedes González de Fernández Ramos nació el 24 de septiembre de 1880, en Santo Tomé, Corrientes, a unos 130 kilómetros de esta ciudad, y falleció en Posadas, el 28 de febrero de 1935.
Fue maestra, profesora de piano y escritora. Es considerada pionera de la educación de Misiones, porque fue quién tomó la iniciativa de gestionar las primeras escuelas secundarias medias del entonces Territorio Nacional de Misiones. Fue la impulsora de un movimiento popular que logró a través del Estado Nacional la creación de la Escuela Normal en 1909, del colegio Nacional en 1917, de la escuela de Artes y Oficios en 1924 y del primer Instituto Musical en 1918, todas en la capital misionera.
En su vida de adulta joven contrajo matrimonio con el escritor, investigador y corresponsal de los periódicos La Nación y La Prensa, el español Ildefonso Raimundo Fernández Ramos, con quien tuvo tres hijos. Durante su vida, Clotilde se desempeñó como maestra y profesora de piano en escuelas primarias y luego como profesora de historia y geografía en las escuelas secundarias de la ciudad, que habían sido impulsadas por ella misma.
Junto a su esposo consiguió traer desde Francia los manuscritos de Aimé Bonpland sobre sus investigaciones realizadas en América, los que fueron traducidos y donados al Museo Argentino de Ciencias Naturales de Buenos Aires. En 1906 integró la comisión de la Biblioteca Escolar de la Escuela Nº 1, realizando al mismo tiempo gestiones para conseguir la creación de una Biblioteca Pública, que luego sería conocida como Biblioteca Popular Posadas. También publicó obras referidas a los orígenes de la ciudad de Posadas y una Antología de literatura americana.
Su obra Reseña Histórica de la ciudad de Posadas fue declarada de Interés Municipal por el Concejo Deliberante local, en el marco de los 100 años de la fundación de la Escuela Normal, en el año 2009. Además, fue reeditada.
Escuela Normal: En 1907, González de Fernández comenzó a encargarse de la creación de Escuela Normal, la primera secundaria del Territorio. Para ello sanciona el estatuto de lo que se denominó desde ese entonces como Sociedad Sarmiento, una asociación que tendría esa finalidad. Ese mismo año empieza a recorrer las calles de la ciudad tratando de convencer a los vecinos sobre el proyecto, y recolectando firmas. Consigue un total de 193 adhesiones y envía su petición en forma de telegrama al Presidente de la Nación y al Ministro de Instrucción pública, entre otras autoridades, y a varios diarios de prensa nacionales. Muchos fueron los argumentos presentados, por lo que en 1909, se firmaba en Buenos Aires el decreto de creación de la «Escuela Normal Maestros Rurales» y de otra en Santa Rosa, La Pampa. Sin embargo, al poco tiempo la escuela dejó de denominarse como «rural» —que les permitía a sus egresados obtener un título como maestros de enseñanza sólo en centros urbanos de hasta 3000 habitantes-, y en 1911 comenzaron a dictarse las clases como en una escuela normal común, cambiando consecuentemente su plan de estudios. En los años posteriores, la lucha de González de Fernández consistió en la construcción de un edificio propio y definitivo para la escuela, consiguiendo recién su propósito para 1920 después de varias idas y venidas. Aunque finalmente el edificio se empezó a construir físicamente al menos unos 30 años después.
Colegio Nacional: Desde el año 1913 realizó intensas gestiones ante la visita a Misiones del Inspector General de enseñanza Secundaria y Especial, conformando la comisión “Pro-Colegio Nacional” para la construcción de una nueva escuela. Entrega nuevamente otra solicitud para la creación de una escuela que fue acompañada por las firmas de los vecinos. Finalmente, en 1917, logra crear el Colegio Nacional Nº 48 -actual Colegio Provincial Nº 1 “Martín de Moussy”-.
Escuela de Artes y Oficios: En 1922, con el apoyo de su esposo Raimundo, presentaron ante la directiva de la Asociación del Magisterio y del profesorado de Misiones, la idea de gestionar la fundación de una escuela de oficios. Se nombró a tres miembros para estudiar la iniciativa y trazar un plan de las gestiones que deberían realizarse o presentarse ante los poderes públicos. El entonces ministro Antonio Sagarna, tuvo especial interés en fomentar escuelas de dicha índole formativa, destinando unos 240 mil pesos moneda nacional de su presupuesto para la creación de 24 escuelas en distintas localidades del país, siendo Posadas una de ellas. Al ser un monto insuficiente, Clotilde de Fernández decidió casi de forma unilateral, conformar una cooperativa con ayuda del gobernador Héctor Barreyro, y de la población para la creación de la escuela de Artes y Oficios. Ellos tenían la misión de recaudar fondos para que con el presupuesto del gobierno nacional se solicitara la inmediata apertura de la Escuela. En abril de 1924 se firma el decreto de fundación del establecimiento, y finalmente el 9 de junio de ese mismo año se dan inicio a las clases en la Escuela de Artes y Oficios -posteriormente Escuela Industrial de la Nación, ENET Nº1 y en la actualidad EPET Nº1 “Unesco”-.