
Tienen 28 y 24 años y los volvieron a detener ayer martes por una seguidilla de robos calificados en poco menos de treinta días.
Pero lo que resulta más curioso es que continúan imputados por el asalto a un predio religioso de Santa Inés (Garupá), donde entre la noche del jueves 17 y madrugada del viernes 18 de septiembre de 2020, amenazaron con armas de fuego y maniataron a una pareja de cuidadores para llevarse, en dos viajes de camión, una veintena de aires acondicionados de 18 mil frigorías y herramientas eléctricas que allí se guardaban y que tenían como destino un templo evangélico en construcción en el paraje Itaembé Guazú de Posadas.
Ayer y tras allanamientos solicitados al juez de Instrucción 1, Marcelo Cardozo, por investigadores de la Unidad Regional X, fueron capturados en dos allanamientos realizados en Garupá los mismos sospechosos de delinquir con la misma modalidad, maniatar a serenos o cuidadores y llevarse todos los equipos electrónicos o herramientas con alto valor de reventa.
Los procedimientos se realizaron desde las 11 de ayer y todos encabezados por el juez mencionado. El primero de ellos en el barrio Ñu Porá, en un taller mecánico de calle Primavera casi Ceibo. Allí fue ubicado uno de los automóviles utilizados para los últimos golpes de febrero y marzo.
El Volkswagen Bora negro (foto) pertenece al sospechosos de 28 años, quien también fue atrapado en este lugar y se le secuestraron una credencial de comisario de policía que no le corresponde, 18 mil pesos en efectivo y varios elementos con pedido de secuestro, entre ellos dos televisores y cuatro teléfonos celulares de pantalla táctil.
En el barrio “El Chogüí”, calle Ramallo y Carancho, también de Garupá fue detenido el sospechoso de 24 años, quien tenía las llaves y el otro vehículo identificado como transporte de los elementos robados, un Volkswagen Vento 2.5 gris. En el predio se incautaron motosierras, planchas, juegos de cubiertos y ollas suntuosos, una lijadora, una soldadora, una amoladora y tres smartphones.
El primero de los robos que los involucran ocurrió el viernes 19 de febrero en el paraje Santa, en un depósito y vivienda del Lote C, cuyo propietario halló al sereno atado de pies y manos. Fueron cuatro hombres cubiertos con gorras y barbijos quienes los amenazaron de muerte con armas de fuego y se escaparon con una computadora una soldadora, un televisor LED de 43 pulgadas, un taladro, el disco rígido de las cámaras de seguridad y el router de Internet que conecta el sistema, una balanza electrónica, una báscula de 300 kilogramos, una motosierra y una motoguadaña de la marca Stihl.
Veinte días después, irrumpieron en una vivienda de la ruta nacional 105, también en Garupá y escaparon con tres televisores LED de 50, 42 y 40 pulgadas, una notebook, y hasta la maquina para tostar pan de la cocina.
Y no conformes aparentemente, siete días después y en Garupá, ingresaron a robar a la vivienda de una mujer de 59 años, en el barrio “Chogüí” (calle Isaza y Malveira), donde rompieron candados y rejas y se llevaron una motoguadaña, motosierra, una garrafa de gas y un taladro.