Es cómo manejan el miedo. Me he percatado de que el coeficiente intelectual financiero está conformado en un 90% por emociones y un 10% por información técnica sobre finanzas y dinero.
Cuando se trata de dinero, nuestras emociones muchas veces se apoderan de nosotros. Sabemos lo que debemos hacer y sin embargo hacemos lo que queremos hacer. Y lo que queremos hacer casi siempre se limita a tomar la opción más segura en lo que sea que hagamos.
Todos tomamos decisiones todos los días, grandes y pequeñas.
La vida nos lanza dificultad tras dificultad y tenemos que decidir cómo responder.
Cuando esto sucede, ¿estás simplemente reaccionando a la situación o estás tomando una elección consciente?
Cuando reaccionas y tomas una decisión basada en tus emociones o instintos, la parte emocional de tu cerebro está en el control, pero cuando haces una pausa para pensar bien tus alternativas y las posibles consecuencias, todo para tomar una decisión basada en los hechos y tanto como en la intuición, eres tú quién tiene el control.
Como dije antes, cuando las emociones crecen, la razón disminuye.
Si no superas el miedo jamás serás exitoso.
Ser humano significa tener emociones. Todos sentimos miedo, tristeza, ira, amor, desilusión, alegría y más. Uno no decide cómo sentirse, sólo siente.
Lo único que podemos decidir es cómo reaccionar a esas emociones.
Cuando se trata de arriesgar dinero, todos experimentamos temor, incluso los más exitosos. La diferencia radica en cómo manejamos ese miedo. Para muchos, el temor se traduce en ideas de “apostar a lo seguro”, de no correr riesgos. Pero para otros ese mismo temor a perder dinero los hace actuar con inteligencia, a aprender a controlar el miedo.
Mismas emociones, diferentes ideas. Ser diferente, hacer algo diferente, tener algo que otros no.
En pocas palabras, los ricos son más maduros cuando se trata de controlar sus temores. No son imprudentes al hacerlo sino que ponen su inteligencia emocional a trabajar para ver más claramente el camino a seguir, incluso ante la incertidumbre y el terror.
Pero todos podemos superar nuestro estado actual y educarnos financieramente para poder crecer y beneficiar a la sociedad.