Ezequiel Galeano continúa en la espera de un trasplante bipulmonar en su casa. Hace una semana le dieron el alta del SAMIC de Eldorado, donde tuvo que ser internado tras una recaída. Según contó la mamá del joven a PRIMERA EDICIÓN, Mercedes, “hace tres días le cambiaron la medicación para ver si mejora e intentar que deje el respirador”. Sin embargo, aclaró que “esto es un día a día y los resultados recién se van a ver dentro de un mes más o menos”.
Dos años de espera
Hace dos años que Ezequiel encabeza la lista de espera del INCUCAI por un trasplante bipulmonar, pero encontrar a su donante no es sencillo ya que debe tener su mismo rango de edad y una contextura física similar.
Por ello, sigue en la espera su donante y luego de seis meses internado en Buenos Aires, desde el Hospital Favaloro organizaron su regreso a Eldorado, porque en el 2020 no le harían el trasplante debido a la pandemia y al riesgo que implica operar en este contexto.
A penas llegó, a mediados del año pasado, Ezequiel comenzó la internación domiciliaria pero, días después de año nuevo, tuvo que ser internado en el SAMIC de Eldorado tras una recaída. Afortunadamente, semanas más tarde le dieron el alta y Mercedes aseguró que “ahora está mejor, se siente mejor. Sigue con todos los cuidados y medicamentos recomendados”.
Desesperante
La mamá contó que, a pesar de que su hijo está bien de ánimo, “es desesperante verlo así porque ya pasaron dos años y él está con el respirador hace mucho tiempo ya y todavía no tenemos ninguna novedad”.
Además, agregó que “tampoco puede salir o recibir visitas debido al contexto pandémico” aunque dijo que “su primo y un amigo lo suelen venir a ver”.
En cuanto a los controles médicos, Mercedes contó que no fueron al hospital desde la última vez que le dieron el alta a Ezequiel, pero está en constante comunicación con sus médicos y psicólogos a través de mensajes y videoconferencias.
Respecto al tratamiento de su hijo, Mercedes contó que “estoy viendo si lo tengo que llevar de nuevo al Favaloro porque cada tres meses tenía controles pero por todo el contexto de pandemia, todavía no se pudo hacer los chequeos correspondientes”.
Tiene fibrosis quística
Ezequiel fue diagnosticado con fibrosis quística a los pocos meses de nacer y su situación siempre fue compleja.
Sin embargo, en enero del 2019, la salud del joven empeoró al punto que tuvo que trasladarse a vivir a la capital del país para recibir la atención médica acorde y esperar un donante compatible para someterse al trasplante que salve la vida.
Pese a la cantidad de medicamentos que tomaba, el estado de Ezequiel era crítico. De hecho, su médico, el neumonólogo Oscar Rizzo había señalado a este Diario que el muchacho “está muy grave”.