Gobernaba Carlos Menem cuando se empezó a hablar del Norte Grande, esta idea de agrupar a las provincias con el fin de “reivindicarlas”, ante la situación de pobreza, indigencia, escasos servicios básicos (como agua, saneamiento y energía por citar algunos), de costos de vida más altos (el NEA encabeza el ranking de inflación en lo que va de 2020).
En lo sucesivo, pasaron la promesa del Gasoducto del NEA con los Kirchner; el Plan Belgrano (lanzado, relanzado y recontra lanzado en diferentes años del macrismo); sin contar intentos menores.
Ahora, el “albertismo” pretende volver a lanzar el Norte Grande con 10 provincias. Como un bloque de gobernadores que gestionarán ante Nación posibles soluciones. De hecho, la puesta en marcha iba a ser el pasado viernes pero el duelo nacional por la muerte de Diego Maradona suspendió la agenda presidencial y se frustró el viaje a Chaco.
Suponiendo que se va a destinar una partida presupuestaria a obras y programas para este Norte Grande: ¿qué garantías tiene Misiones de obtener los recursos que le corresponden, teniendo como antecedente muy vigente el reparto de la coparticación?
Ese Norte Grande para los discursos políticos debe dejar de ser un suceso político para convertirse en soluciones para los que habitan el NEA y NOA. Donde falta cobertura social, fuentes de trabajo, mayor infraestructura en salud y educación, sin olvidar las soluciones habitacionales en demanda constante.
Los constantes fracasos de gestión (sin distinción de colores políticos) para concretar la reparación histórica, provocaron descreimiento, desesperanza y rechazo ante anuncios grandilocuentes.
Los argentinos de esta parte del territorio nacional volverán a creer en los nombres marketineros cuando comiencen a vivir en espacio de mayor equidad, de oportunidades para volver a empezar o para crecer.
Por ahora, este Norte Grande la sigue peleando para no empeorar.
Bienvenida la autocrítica
Finalizadas las largas jornadas de combate a las decenas de focos de incendio (los más grandes en la Reserva de Biósfera Yabotí), el ministro de Ecología Mario Vialey, fue preguntado si hacía alguna autocrítica respecto de la reacción estatal ante estos siniestros, en especial porque no hubo aviones hidrantes ayudando al centenar de bomberos, policías y voluntarios que se sumaron a las tareas; a las críticas que hizo la organización ambientalista Kaapuera respecto a la capacitación del personal y la organización del área contra incendios.
“La autocrítica la hacemos para adentro”, respondió el apostoleño al admitir no haber leído el documento de Kaapuera.
“Tengo varios puntos de esta enseñanza, porque es muy distinto estar mirando desde afuera y no desde adentro del lugar. Eso también me trajo una enseñanza”, dijo Vialey.
La autocrítica siempre es bienvenida cuando se toma muy en serio y se actúa en consecuencia para no volver a cometer los mismos errores, para sobreponerse a las falencias de equipamientos, para capacitar al personal, para monitorear las áreas protegidas. Porque, de lo contrario, la autocrítica quedará puertas adentro de Ecología pero los bosques se seguirán cocinando en las llamas y, con ellos, una parte de nuestro oxigeno, de nuestra biodiversidad. El IMiBio lanzó una alerta sobre el importante volumen de fauna en riesgo de extinción que los incendios pueden terminar de hacer desaparecer.
Por esta razón la autocrítica de quienes deben velar por la preservación y recuperación de lo perdido, debe ser rápida a sabiendas que hasta marzo hay riesgo de una cadena de repetición de incendios como los vividos esta semana. En especial porque las personas no toman conciencia de sus actos al prender fuego (de cualquier tipo, ya que está prohibido) y la Justicia y nuestras leyes no tienen previstas penas por delitos ambientales ya que nunca se reformó el Código Penal en ese sentido.
Hay un sector del Gobierno provincial que pretende reabrir el debate sobre la gestión misionera sobre los recursos naturales (aquí entra el Parque Nacional Iguazú, los cursos de agua, entre otros). Judicialmente a Misiones no le fue bien ante la Corte Suprema aún cuando hizo el intento por ley.
“En momentos donde el turismo internacional está vedado por la pandemia, surge replantearse nuevamente, como tantas otras cosas, la pertenencia de los recursos naturales a las provincias y volver a instalar el debate sobre la propiedad o la pertenencia de una maravilla natural como las Cataratas de Iguazú, que fueron cedidas a la administración nacional por algún claro error del pasado pero en algún momento, tarde o temprano, deberán volver bajo administración de los misioneros que son quienes la cuidan y deberían ser los verdaderos tenedores de este bien tan preciado por el mundo entero”, fundamentó un asesor de la Rosadita sobre la postura “provincialista”.
“Las riquezas naturales fueron uno de los despojos más antiguos de la Nación a las provincias y, en este tiempo donde se instaló fuerte la palabra federalismo por parte del Gobierno nacional, no es descabellado empezar a replantear esta simbología con profundidad, pensando en que se cumpla sin hipocresía la manda constitucional que indica que los recursos naturales pertenecen a las provincias”, agregó.
¿Realmente estamos preparados para hacernos cargo? Pareciera que todavía debemos calibrar la capacidad de respuesta, después de lo vivido hace apenas unos días.
Mayoría por las dos vidas
En dos días el Congreso reactivará -a modo express- el debate por el aborto legal y gratuito. Los legisladores de Misiones han visibilizado sus posturas en las últimas horas, con un oficialismo renovador encolumnado al rechazo de la propuesta del presidente Alberto Fernández.
Así, los diputados Diego Sartori, Ricardo Wellbach y Flavia Morales irían por el no aunque no se descarta una abstención. Morales y Wellbach ya se habían opuesto a la IVE en 2018.
En el kirchnerismo, en el mismo camino, ya se anticipó ayer Héctor “Cacho” Bárbaro (PAyS – FdT), más cerca de la abstención. Mientras que Cristina Britez votaría a favor, tal como lo hizo en la anterior oportunidad.
Los dos diputados nacionales misioneros de Juntos por el Cambio irían contra la iniciativa presidencial. Luis Pastori ya la rechazó en 2018 cuando Macri la puso en el debate; y Alfredo Schiavoni firmó en campaña un compromiso “por las dos vidas”.
En el Senado, Maurice Closs confirmó que votará en contra y su par Maggie Solari haría lo propio tal como ya se expresó años atrás. En cambio, Humberto Schiavoni sería del bloque PRO a favor de la despenalización, repitiendo el voto de agosto de 2018.