Locatarios de espacios comerciales de la terminal de ómnibus de esta ciudad solicitaron al Concejo Deliberante de Oberá algún proyecto que les exima del pago de alquileres por un tiempo determinado, para poder recuperarse de la prolongada inactividad.
“Desde el 19 de marzo en que se inició esta pandemia, estamos con los kioscos cerrados hasta hoy. Todos nos hemos fundido porque la mercadería se venció, la tiramos o regalamos, algo consumimos, pero en definitiva nos arruinamos. Muchos vivían de esta actividad”, argumentó
Clara Paredes, una de las comerciantes, quien aclaró que durante estos ocho meses la Comuna no les cobró el alquiler, pero “ahora nos dijeron que se abría la terminal y que si queríamos volver a trabajar, podíamos hacerlo, pero pagando”.
Con la reactivación del servicio interurbano de pasajeros, los kioscos ubicados en ese sector decidieron abrir, pero todos los locales del lado de media y larga distancia permanecen cerrados. “Son cuatro los que abrieron abajo, pero el movimiento y el protocolo no permiten que circule mucha gente, no van a sacar ni para el alquiler. Los de arriba no estamos trabajando porque no tiene sentido, no hay nadie, está desolado”, describió.
Los locatarios, que se mantienen en contacto a través de un grupo de WhatsApp, se reunieron y decidieron presentar una nota al Ejecutivo y al Deliberativo, solicitando contemplación: “Se hizo una nota a las autoridades pidiendo que nos den unos meses sin cobrarnos el alquiler, porque es muy difícil remontar luego de ocho meses parados. Necesitamos surtir nuevamente los kioscos y a esto sumar los gastos fijos, entre ellos el alquiler. Va a ser imposible cumplir. Queremos arrancar todos cuando se autoricen los viajes, pero que no nos cobren o nos den plazos, buscarle la vuelta”, planteó.