La frágil situación económica del país recrudeció afectando a varios rubros, por la fuerte escalada que atraviesa la cotización del dólar junto a las restricciones sanitarias impuestas por la pandemia del COVID-19.
En ese contexto, uno de los sectores más castigados es el rubro de la construcción donde se advierte escasez de materiales.
Muchos constructores indicaron que en los corralones, cuando piden bolsas de cemento, reciben solamente una cuarta parte de lo solicitado, lo cual hace que deban recorrer varios lugares con el objetivo de poder conseguir lo necesario para avanzar con las obras. Además, señalaron que los pedidos de arena demoran más de una semana.
A esto se suma que muchas familias, al no poder viajar, decidieron invertir en mejoras y ampliaciones de construcción en sus casas, motivo por el cual, crece el trabajo pero la falta de materiales que obliga a que las obras se retrasen.
Al respecto, en diálogo con PRIMERA EDICIÓN, Sergio Bresiski, empresario del sector industrial reconoció que “hay faltante de materiales de construcción. Empieza a haber desabastecimiento, al igual que se está dando en un montón de otros rubros. Dentro de ese contexto, nosotros estamos sufriendo también el faltante”.
“El problema que hay que poner sobre la mesa es muy amplio, hay que dejar de tomarlo de manera superficial porque así nunca llegaremos a buen puerto”, consideró y agregó que “radica en cuestiones históricas, en Argentina hace más de cuatro décadas que se viene haciendo una desindustrialización militante. Es algo que se agravó en cada gobierno que tuvimos y hoy ante el caos que está generando la pandemia y la cuarentena, ese fenómeno se acentúo aún más”.
“Cuando arrancó la cuarentena tuvimos un Presidente que dijo que prefería tener un 10% más de pobres y no tener cien mil muertos por la pandemia. Entonces, el mensaje que dio en ese momento fue que no le importaba si se destruía la economía. Ante esto, lo que hicieron los empresarios industriales grandes, que en Misiones tenemos muy pocos pero que a nivel nacional son muchos, fue bajar la producción a niveles más razonables de acuerdo al mensaje que estaba dando el Presidente en ese momento”, recordó.
Al mismo tiempo afirmó que “eso produjo un freno total en la capacidad instalada que teníamos como industriales, aparte tuvimos un cese total del 100% de las inversiones que se iban a realizar, y además se dio la fuga de ese dinero que se iba a invertir en Argentina hacia otro lugar”.
“Hoy estamos parados en un escenario en el cual hay como cuatro o cinco dólares diferentes. Argentina hoy no tiene moneda porque lo que debería tener atrás es el respaldo de los bienes que produce un país, y hoy al no tener industrias o tener la capacidad instalada muy por debajo de lo que serían niveles óptimos, no poseemos bienes transables para ofrecer al mundo, entonces la moneda no tiene valor”.
“Otro problema es que se está impidiendo que los industriales puedan importar materia prima para empezar a recuperar niveles de producción, y eso hace que todo se frene totalmente”, opinó.
Obras en pausa
El faltante se profundiza con los ladrillos, cerámicos, hierro, chapa y alambres hasta clavos, situación que perjudica tanto a la obra pública como a la privada.
Así, según remarcaron comerciantes a este Diario, “hay mucha demanda de los clientes pero las fábricas están a media máquina, entonces cada vez tenemos menos respuestas para varios pedidos. La mayoría de los consumidores quieren reservar algo para asegurar el precio actual, pero eso se hace muy complicado teniendo en cuenta la gran incertidumbre que padecemos todos los sectores de la cadena”.
Cabe recordar que el intendente posadeño, Leonardo Stelatto, manifestó a este Diario, en la publicación del pasado domingo 11 de este mes, que la crisis económica “en el orden nacional, afecta mucho la provisión de ciertos insumos para la continuidad de las obras en diferentes sectores que estamos trabajando”.
“No tenemos provisión de hierros y perfiles que necesitamos para los conductos, y eso hace que algunas obras se vayan demorando. No es que estamos abandonando sino que falta provisión de insumos a nivel nacional, eso repercute en la demora de ejecución de algunas obras que se habían comenzado”.
Misiones foco positivo
Sergio Bresiski remarcó que dentro del contexto nacional “Misiones es un foco positivo. En la provincia se dijo desde un primer momento que vamos a tener una visión dual, cuidando la salud sin desatender la economía. Entonces hoy Misiones está trabajando en un ritmo bueno, con la frontera cerrada que favorece muchísimo, y al trabajar a un ritmo bueno se dan picos de demanda, como el que se registra en los materiales de construcción. Pero a nivel nacional la capacidad instalada está muy por debajo de los niveles óptimos, entonces hay lugares que no pueden abastecerse por eso”.
“En particular, Misiones está atravesando un buen momento, tenemos buenos índices hoy de venta en gran parte de los rubros y hay otros a los que todavía le está costando levantar. En relación a la mirada hacia el futuro, hasta que el Gobierno nacional no diga cuál va a ser realmente el plan económico o no establezca el objetivo, vamos a tener estas pequeñas primaveras como la que estamos viviendo hoy pero también es cierto que una golondrina no hace la primavera. Hoy estamos en una situación extraordinaria muy buena como provincia, porque hay reactivación, pero también estamos insertos en un país donde tarde o temprano vamos a recibir el coletazo de las cosas mal hechas a nivel nacional”, sentenció.