El presidente de la República del Paraguay, Mario Abdo Benítez, participó hoy en la 75 Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), de manera virtual y uno de los temas abordados fue la reciente muerte de dos niñas (nacidas en la Argentina) en manos de la fuerza pública en un campamento del EPP, la crisis sanitaria y económica como resultado del coronavirus, las denuncias sobre violación de derechos humanos contra Venezuela y la inclusión de Taiwán en el sistema de Naciones Unidas.
“Condenamos enérgicamente el terrorismo y a los grupos criminales que utilizan niños y adolescentes como escudos humanos para protegerse, que los explotan, los exponen a violencia, los adoctrinan y entrenan en el uso de armamentos”, remarcó el presidente paraguayo.
Asimismo, dijo que niños que deberían estar en sus hogares son utilizados por “delincuentes que recurren al secuestro, la extorsión y el narcotráfico para mantenerse, que imprimen dolor en nuestra familia y Paraguay lo está sufriendo”.
“Esto me llama a ratificar el deber de proteger a los habitantes de mi país de estos grupos criminales que pretenden justificar sus conductas ilícitas con narrativas camufladas de ideología, apoyados por aparatos de propaganda diseñados para distorsionar la verdad”, afirmó.
Entre tanto, remarcó que la ilegalidad es audaz al momento de encubrirse, “es muy hábil en adquirir fachadas de bondad y altruismo, pero el Paraguay no se deja engañar y no descansaremos hasta que les caiga todo el peso de la ley”. El primer mandatario no especificó a qué grupos o qué acciones se refiere al señalar esto.
Las palabras del presidente guardan relación a la muerte de dos niñas argentinas que viajaron desde Misiones a Paraguay, en un campamento del EPP, quienes no formaban parte de la organización, según las denuncias de los familiares, pero se encontraban visitando a sus padres, miembros del grupo criminal.
Pandemia del coronavirus
Por otra parte, el mandatario lamentó la pérdida de vidas humanas como consecuencia de la pandemia del coronavirus (Covid-19) y coincidió con la canciller alemana Ángela Merkel, en cuanto a considerar que es la mayor crisis después de la Segunda Guerra Mundial.
En ese sentido, mencionó que la crisis sanitaria derivó en una crisis económica, con la destrucción de empleos, endeudamiento y dificultades de pago.
“Considero que los organismos financieros multilaterales deberían rediseñar sus estrategias para fomentar la reactivación económica con una mirada más humana, solidaria y extraordinaria”, abogó, a la vez de señalar que las nuevas problemáticas no pueden ser abordadas de manera aislada.
Abdo también destacó la agenda del 2020 y recordó que los países en desarrollo sin litoral tienen necesidades especiales y desafíos particulares que deben ser atendidos, por lo que resaltó la importancia de la implementación efectiva del programa de acción de Viena, en especial por los países de tránsito, en el espíritu integracionista de aumentar el intercambio comercial y lograr beneficios mutuos para las economías y sociedades.
El presidente también apuntó a la pronta firma del acuerdo entre Mercosur y la Unión Europea, así como con la Asociación Europea de Libre Comercio.
Venezuela y Taiwán
Como en ocasiones anteriores, el mandatario reiteró el apoyo al pueblo venezolano y a las denuncias internacionales contra violaciones de los derechos humanos en dicho país. “Expreso una vez mi solidaridad con el sufrimiento del pueblo venezolano”, manifestó Abdo Benítez.
Entre tanto, dijo que sobre la base del principio de universalidad que caracteriza a la ONU, expresa su apoyo a la solicitud de Taiwán de ser incluido en el sistema de Naciones Unidas.
Fuente: ultimahora.com