La industria metalúrgica espera recuperarse tras la pandemia del coronavirus que paralizó totalmente al sector. Es que si bien la actividad está volviendo poco a poco, advierten que “el 25% de las empresas están con actividad nula”.
Días atrás, y tras extensas negociaciones, la Cámara de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica Argentina (CAMIMA) y otras entidades del sector firmaron con la Unión Obrera Metalúrgica de la República Argentina (UOM) un acuerdo salarial que establece el pago de una Gratificación Extraordinaria de carácter no remunerativo para los trabajadores.
“Hemos acordado con la UOM este pago no remunerativo de 30 mil pesos para trabajadores metalúrgicos que se abonará en 5 cuotas mensuales y consecutivas de 6 mil pesos, desde agosto a diciembre inclusive”, afirmó en diálogo con la FM 89.3 Santa María de Las Misiones el ingeniero José Luis Ammaturo, presidente de la CAMIMA.
Sin embargo, indicó que se llegó a este acuerdo en medio de una situación compleja debido a que “gran parte de las industrias están paralizadas o semiparalizadas”.
“Están comenzando a tener actividad pero todavía deja mucho que desear. Entendemos que la situación de los trabajadores metalúrgicos es compleja, hay una inflación incipiente y el poder adquisitivo de los sueldos ha mermado”, comentó.
Por todo esto, destacó que este acuerdo “se trata de un paliativo que se seguirá conversando en enero de 2021. Haremos un monitoreo para ver cómo evolucionan los costos”.
Recordó a su vez que antes de la pandemia, durante marzo, ya tenían una “actividad menguada. Nuestras industrias no estaban al 100 por ciento de su capacidad. No obstante, había actividad”.
Ammaturo explicó que “la metalúrgica es una industria transversal, esto significa que trabajamos para distintos tipos de rubros como la agroindustria, el petróleo, minería y la alimenticia”. Por lo tanto, aclaró que “habían metalúrgicas que tenían actividades diversas en marzo, por ejemplo las que tenían que ver con las petroleras que estaban muy bien, pero hoy cinco meses después están bastantes desequilibradas”, aclaró.
Asimismo, indicó que las metalúrgicas “han tenido evoluciones diferentes, según el rubro”.
“Estábamos en una situación que no era de las mejores, en abril la metalúrgica estuvo paralizada, salvo muy pocas que estaban ligadas a las industrias esenciales. Hoy vemos que hay mayor actividad no obstante a eso, de acuerdo a encuestas propias, casi el 25% de nuestras empresas están con actividad nula o muy baja actividad”, advirtió.
Falta de pedidos
El titular de la CAMIMA señaló que las empresas socias manifestaron su preocupación debido a “la falta de pedidos”. Por ende se ha intervenido desde la Cámara y el Sindicato “para evitar cierres”.
“El acuerdo firmado contempla el pago del 70% del salario en caso que las actividades estén suspendidas por la falta de trabajo. Es un paliativo importante para que puedan sobrellevar esta situación de la mejor manera”, apuntó.
Observó además que “es algo que no hemos vivido nunca. El tema sanitario ha influenciado en lo económico, lo que ha llevado a una baja actividad. El mercado recién empieza a moverse un poco, entonces había que buscar un paliativo”
Consultado sobre las incorporaciones de personal en el sector, Ammaturo dijo que por el momento “no están ocurriendo”.
“En base a nuestras encuestas aproximadamente el 25% de las empresas asociadas a la metalúrgica han vuelto a tener una actividad similar a la que tenían en marzo del 2020. Y hay un 75% que está muy por debajo, en el cual un 50% está con un 30% menos de actividad promedio, mientras que un 25%, es decir, un cuarto de las empresas está sin actividad. Es un escenario muy complejo para pensar en la incorporación de personal”, argumentó.
No obstante rescató que a pesar de este panorama “hubo pocos despidos”.
“Lleva años formar a un trabajador metalúrgico, son personas con una determinada experiencia y en una crisis perderlo es realmente perder un capital importante”, apreció.
