
El jugador belga Boli Bolingoli, de Glasgow Celtic, admitió hoy haber violado la cuarentena a la que estaba obligado al volver de un viaje a España y no solo jugó en el partido ante Kilmarnock, que terminó 1-1, sino que impulsó al gobierno de Escocia a analizar la posibilidad de suspender el campeonato.
Quienes regresan a Escocia desde España deben permanecer dos semanas en aislamiento y Bolingoli no lo hizo al jugar el domingo el partido con Kilmarnock, por la segunda fecha de la Premiership.
Glasgow Celtic inició entonces una investigación interna pese a las disculpas ofrecidas por el belga, cuya actitud pone en riesgo la continuidad del torneo, del que van solo dos fechas y que lideran Hibernian, Rangers y Ross County, con seis puntos, informó la agencia de noticias ANSA.
“Es difícil imaginar una acción más irresponsable en las circunstancias actuales, y no le encontramos explicación”, escribió el equipo en su comunicado, añadiendo que tomaría “una decisión inmediata siguiendo (sus) propios procedimientos disciplinarios”, sintetizó el Celtic en una misiva abierta.
“Estamos hablando con el club y los órganos rectores del fútbol para esclarecer los hechos”, dijo de su lado el Gobierno, que ya había expresado su fastidio con ocho jugadores de Aberdeen que concurrieron a un bar la semana pasada, tras lo cual dos resultaron positivos en coronavirus. Por esa situación, el partido que ese club debía disputar frente a St. Johnstone el sábado tuvo que ser suspendido.
Las autoridades nacionales amenazaron con frenar el campeonato si se repiten este tipo de violaciones al protocolo sanitario. La primer ministra, Nicola Sturgeon, consideró que tanto a Aberdeen como a Glasgow Celtic no debió permitírseles jugar esta semana.
Fuente: Agencia de Noticias Télam