Personal de Cibercrimen incautó dos teléfonos celulares y una notebook que serán peritados, en el marco de la investigación por la red que cometía “estafas online” a comercios. Fue ayer y tras un allanamiento en el domicilio de dos de los tres detenidos en el marco de la investigación.
Los efectivos esperan encontrar elementos de interés para la causa en dichos móviles y dispositivo informático secuestrados, teniendo en cuenta que la maniobra de defraudación era compra de productos por internet con tarjetas de crédito a nombre de personas que, en algunos casos, desconocían que contaban con dicho plástico, indicaron las fuentes.
Tal como publicó ayer PRIMERA EDICIÓN, el caso salió a la luz el pasado martes tras un operativo de la Policía en un comercio posadeño, donde la presunta banda intentó adquirir, a través de la citada vía, televisores y otros artefactos en dicho lugar y en su sucursal en Oberá.
Los uniformados fueron alertados por empleados de la firma, quienes notaron que había muchas transacciones con las mismas tarjetas y con los mismos correos de contacto, aunque la compra era efectivizada por terceros.
El negocio damnificado constató que entre el sábado y el martes pasado, a través de una plataforma virtual, distintos usuarios hicieron las compras y en casi todos los casos, usaron una o varias tarjetas de crédito a nombre de personas que residen en otras provincias, como ser San Juan.
Se presume que es del mismo IP informático para dichas compras y que pertenecen a un dispositivo móvil o en su defecto computadora portátil.
Una de las personas que figuraba como titular de una de las tarjetas, fue contactada por los investigadores y además de comprobar que reside en San Juan, adujo desconocer tales transacciones y que ni siquiera utilizaba tarjetas de crédito.
Esto derivó en la hipótesis que los plásticos eran obtenidos con datos robados de personas alejadas a operaciones crediticias y que nunca sospecharían de una compra no realizada si no usaban directamente créditos o tarjetas.
De todas formas todo es objeto de investigación y por el momento se presume que se trata de una red dedicada a este tipo de estafas, lo que configuraría el delito de asociación ilícita, indicaron las fuentes.
El martes fueron detenidos dos hermanos mellizos de 31 años y más tarde una mujer de 54. Los mismos se dirigieron al comercio posadeño a retirar compras que se hicieron con la misma modalidad y tarjeta. Se estima que en las quince transacciones detectadas entre el sábado y el martes, los montos serían cercanos a los 200 mil pesos.
Ayer, con orden del Juzgado de Instrucción 1 de Posadas a cargo de Marcelo Cardozo, los efectivos allanaron la casa de los citados hermanos. En el inmueble, los investigadores secuestraron dos celulares y una PC portátil los cuales ya son analizados para confirmar o descartar su relación con la causa.