El avance significativo de la pandemia de coronavirus ha llevado al mundo a parar, dejar de lado muchos aspectos, como el caso del deporte, y apostar a la prevención para tratar de evitar el mayor crecimiento de contagios y víctimas fatales.
Si bien en un principio los números en Perú eran inferiores en relación a otros países de Latinoamérica, en los últimos días las cifras crecieron rápidamente en ese territorio, pese al aislamiento obligatorio decretado por el presidente Martín Vizcarra. Los infectados ya eran ayer más de siete mil y se contabilizaban alrededor de 350 víctimas fatales.
Ese es el marco que hoy por hoy rodea al delantero misionero Marcelo Olivera, quien mantiene la cuarentena a puro entrenamiento en su departamento. El delantero oriundo de Colonia Victoria, quien se desempaña en el Club Universidad San Martín de Porres de la Primera División del fútbol incaico, viene de seis meses de parate tras haber sufrido la rotura de los ligamentos cruzados y si bien ya volvió a las canchas en esta temporada, necesita de diversos ejercicios para ponerse a punto.
En charla exclusiva con EL DEPORTIVO desde Santa Anita, sector de la capital peruana, el ex Quilmes manifestó que “acá estamos como en todo el mundo, cumpliendo con el aislamiento, que sin lugar a dudas es lo mejor para prevenir el avance de esta enfermedad. Si bien hoy por hoy los casos son mucho menores que en otros lados, hay que tomar los recaudos necesarios.
Hay gente que entiende y otros que todavía no se percatan de la magnitud de esto”, especificó el player misionero.
En los últimos días, Perú superó los siete mil casos y Lima se transformó en una de las capitales más afectadas. “Estamos todos muy pendientes de lo que suceda, como así también hablo todos los días con mi familia para saber cómo va la cosa allá en Misiones y les transmito tranquilidad”, indicó.
Sobre cómo es su día a día, el punta dijo que “trato de mantener la calma y entrenar en casa. Me hicieron llegar desde el club un par de aparatos y trabajo con una rutina que nos preparó el profe. Tenemos varias charlas a través de teleconferencia y buscamos la manera de seguir conectados”.
“El parate me hace perder un poco de ritmo nuevamente, porque estaba volviendo de a poco tras la lesión”. Con relación al regreso a las canchas, el embajador de la tierra colorada prosiguió diciendo que “me sentí muy bien en los minutos que tuve, pero soy consciente de que es todo de a poco. Tengo que seguir trabajando para poder volver al nivel que tuve antes de lesionarme”.
Por último, el surgido en Deportivo Victoria y formado en Unión Cultural y Deportiva Eldorado indicó que “tenemos un buen equipo y aspiramos a poder clasificar a alguna copa. Veremos cómo se vuelve tras este parate”.
Al respecto, desde la Federación Peruana barajan la posibilidad de que la pelota vuelva a rodar en mayo, aunque con todos los partidos a puertas cerradas y bajo los protocolos de la CONMEBOL.