El intendente de Puerto Rico, Carlos Koth, puso el jueves en conocimiento de las autoridades policiales y les pidió una urgente intervención en la confusa situación que se generó con una empresa local que presta servicios de transporte de personas, cuando los choferes y los pasajeros de una unidad de esta compañía, pretendieron usar las instalaciones de una estación de servicios, ubicada en inmediaciones de uno de los accesos a esta localidad.
La reacción del jefe comunal se produjo ante un llamado de alerta que recibió desde una estación de servicio local. Esto, luego de que los responsables del lugar les negaran a los choferes y pasajeros, el descenso de la unidad para el uso de las instalaciones, ya que los conductores –ambos domiciliados en esta localidad, igual que la empresa para la que prestan servicios-, dieron a conocer que el pasaje estaba conformado por turistas procedentes de Brasil, país declarado ‘de riesgo’ por el Gobierno argentino, en relación a la pandemia del Coronavirus.
Koth, quien amparado por la Carta Orgánica Municipal el domingo decidió prohibir el ingreso a la ciudad de toda persona no domiciliada en el municipio, realizó inmediatamente la presentación policial y acompañó las imágenes de la unidad de transporte en la playa de maniobras de la estación de servicios –provista por la misma empresa-.
Además, solicitó que una vez que regresen los choferes, activen el protocolo y garanticen su absoluto cumplimiento por parte de los trabajadores, de los eventuales pasajeros que pudieran transportar al regreso e, incluso, de la unidad.
Esta intervención del jefe comunal pone sobre relieve algunas cuestiones evaluadas por el mandatario y su equipo, a la hora de tomar la decisión de cerrar todos los accesos al municipio. La primera es la actuación sin vacilaciones de las autoridades comunales, a la hora de garantizar el cuidado de la salud de la población ante la amenaza de la pandemia, así como la colaboración de la sociedad a la hora de poner en práctica y hacer cumplir las disposiciones.
Esto puede evidenciarse en el accionar de los integrantes de la estación de servicios, desde donde alertaron al intendente. “Esta forma de trabajar unidos, es la mejor manera de prevenir, de cuidarnos, de protegernos”, destacó Koth.
Por otra parte, un párrafo aparte merece la rápida acción de los efectivos de la Policía de Misiones. La fuerza colaboró en todo momento de manera incondicional con el municipio desde el arranque de la emergencia sanitaria.
Es que en este caso puntual del que tomaron conocimiento mediante la presentación de jefe comunal, los uniformados se movilizaron inmediatamente para constatar que ningún pasajero haya descendido en esta ciudad. De haber ocurrido eso, inmediatamente se debía activar el protocolo establecido por las autoridades sanitarias para estos casos.
Sin bien en ese sentido la comunidad puede estar tranquila, porque está comprobado que no hubo descenso de pasajero alguno en el municipio. De todas maneras las investigaciones continúan, especialmente porque la unidad de transporte fue interceptada en Rosario –destino final del viaje-, donde sus ocupantes debieron enfrentar todo tipo de control: médicos, policiales y judiciales.