Sin embargo, lejos de mejorar la situación, los vecinos aseguraron estar “peor que antes”.
“Cuando hicieron parte de la canalización, nos sacaron los tubos y la situación empeoró, porque antes el agua pasaba por ahí y nos permitía entrar y salir de nuestras casas al menos”, dijo a PRIMERA EDICIÓN Noelia Kallsten, una de las vecinas de calle Los Andes y Suecia.
Agregó que “ahora, cada vez que llueve no podemos salir, porque el agua que pasaba dentro de los tubos y por la zanja que había, ahora pasa por la calle directamente y el entubado que hicieron no soporta el caudal de agua que corre”.
Seguimos esperando
En abril del año pasado, se hizo una reunión con los vecinos, donde les mostraron el proyecto con el presupuesto aprobado y listo para comenzar en octubre la canalización del agua, la construcción del cordón cuneta y el empedrado.
Sin embargo, hasta el día de la fecha, siguen esperando. “El agua la tenemos que traer de dos cuadras de nuestras casas, porque la Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá (CELO) dice que va a venir después que hagan el cordón cuneta y el empedrado, pero la Municipalidad nos dice justamente lo contrario: que no va a venir hasta que CELO no realice la extensión del agua”, dijo Kallsten.