Entre 3.000 y 3.500 uniformados serían enviados a la región, según señalaron los canales de televisión estadounidenses CNN y NBC, que citaron fuentes militares y de defensa.
La iniciativa, que aún no fue anunciada oficialmente, se daría después de que Teherán prometiera “una dura venganza” por el asesinato en un ataque estadounidense en Irak del general Qasem Soleimani, jefe de la Fuerza Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Iraní y arquitecto de las intervenciones del país persa en la región.
En la ofensiva, fallecieron además otras nueve personas, entre ellas Abu Mahdi al-Muhandis, vicecomandante de Hashed al-Shaabi (Fuerzas de Movilización Popular), la coalición de milicias iraquíes que atacó el pasado martes la embajada estadounidense en Bagdad.
El asalto a la sede diplomática norteamericana fue una respuesta a bombardeos estadounidenses en Siria e Irak contra milicianos chiitas de las Brigadas de Hezbollah, a los que Washington vinculó con Irán y responsabilizó de la muerte de uno de sus ciudadanos el pasado 27 de diciembre en Irak.
Por el ataque a la Embajada en Bagdad, Estados Unidos ya había enviado esta semana 750 soldados a la zona, procedentes de un cuerpo de infantería con base en Fort Bragg, en el estado de Carolina del Norte.
El nuevo despliegue militar incluiría al resto de los integrantes de dicha brigada, lo que supondría entre 3.000 y 3.500 soldados, de acuerdo con la NBC y CNN.
Según el diario The Wall Street Journal, el despliegue podría producirse este fin de semana como pronto.
El asesinato de Soleimani constituye una abrupta escalada en el enfrentamiento entre Washington e Irán, que hace temer una nueva guerra en Medio Oriente.
El Pentágono confirmó su muerte esta madrugada en un ataque con drones en el aeropuerto internacional de Bagdad y justificó su accionar al asegurar que el general iraní estaba desarrollando planes para atacar a miembros del servicio estadounidense en Irak y en toda la región.
Fuente: Agencia de Noticias Télam