El dólar en el Banco Nación Argentina (BNA) se cotizaba este lunes a 51,50 pesos tras las elecciones primarias del domingo, mientras que en promedio en el resto de las entidades financieras privadas se negocia a 60 pesos en las primeras transacciones.
La divisa había cerrado el viernes a 46,40 pesos en el BNA, lo que equivale a una suba del 11, al menos en la entidad financiera rectora.
Sin embargo, la página del BNA colapsó y a media mañana permanecía caída.
El brutal salto en el precio de la divisa es, según analistas, consecuencia del resultado de las elecciones PASO, en las cuales el oficialismo perdió por amplio margen y la oposición logró un masivo triunfo de la mano del candidato Alberto Fernández.
Balanz Capital, agente de liquidación y compensación en los mercados BYMA, MAE y Rofex, ofrecía este lunes por la mañana el dólar a 49 pesos después de subirlo dos y medio tras el resultado de las elecciones primarias.
Si bien los bancos comerciales públicos y privados operan desde las 10:00, ya hubo movimientos con el tipo de cambio en las sociedades de Bolsa que operan las 24 horas vía internet, con Balanz Capital y Bull Market Brokers moviendo desde el mismo domingo.
Bull Market Brokers llevó el precio de la divisa estadounidense para la venta de 46 a 48,80 pesos entre que se conoció el resultado electoral y la mañana de este lunes.
En la provincia clave de Buenos Aires, donde se encuentra cerca del 37% de los votantes del país, el candidato a la gobernación del Frente de Todos, Axel Kicillof, logró un 49,3% de los votos, frente al 32,6% de la actual gobernadora, María Eugenia Vidal, quien era considerada la mejor carta electoral del oficialismo.
El aumento de la inflación, el desempleo y la pobreza -que podría llegar al 35% este año- son el talón de Aquiles de Macri, en quien muchos votantes ven, sin embargo, a un impulsor de la transparencia y de las obras públicas.
“Es un resultado conmocionante y prácticamente irreversible, que deja al Gobierno en un vacío de poder en medio de una economía muy delicada. La principal responsabilidad de ambas fuerzas deberá ser garantizar la gobernabilidad por sobre la campaña”, dijo la analista Shila Vilker, de la consultora Trespuntozero.
Para el analista político Julio Burdman “no hay ninguna posibilidad” de que el resultado se revierta en octubre.
Hasta hace meses un operador político, Fernández fue tentado por la exmandataria Cristina Fernández de Kirchner -de quien fuera jefe de Gabinete- para encabezar la fórmula presidencial opositora. Fernández es un político moderado que ha logrado aunar a gran parte del peronismo dentro de la coalición Frente de Todos.
Mientras que el actual presidente propone avanzar con la apertura de la economía y el ajuste del Estado, Fernández es proclive a una mayor intervención estatal para impulsar el mercado doméstico y hacer crecer la actividad, actualmente paralizada.
La mayoría de los partidos ya ha definido antes de las primarias a sus principales candidatos, quienes competirán por la presidencia en las elecciones generales del 27 de octubre, que se dirimirán en un balotaje -el 24 de noviembre- si ninguno de los postulantes obtiene más del 45 por ciento de los votos o el 40 por ciento y una diferencia de 10 puntos porcentuales sobre el segundo.
Además del presidente, en las elecciones de octubre los argentinos elegirán diputados, senadores, gobernadores y dirigentes locales.