La Comisión de Tránsito y Transporte del Concejo Deliberante se encuentra debatiendo sobre la modificación de la ordenanza de remises. Se intenta ampliar la vida útil de los móviles y bajar las cilindradas de 1.6 a 1.4.
En tanto, en la última sesión los presidentes de los bloques dejaron entrever que estaban recibiendo presiones por parte del sector a través de mensajes. Sin embargo, desde los remises negaron ser ellos los protagonistas.
Al respecto, la secretaria general del Sindicato de Taxis y Remises, Sandra Barrios, dijo a PRIMERA EDICIÓN que “este es un sector tranquilo. Es un tema que estamos tratando de que se solucione desde hace tantos años, así que no vamos a tener una actitud así”.
En relación a los mensajes que habrían recibido los concejales, manifestó que “se trató de un malentendido” porque “otra parte pensó que se estaba por aprobar algo relacionado al UBER, pero en realidad, en el debate del lunes, sólo se trató el tema de las cilindradas y la vida del útil de los remises”.
Además, agregó que “no hay ninguna posibilidad de haya debate por el tema de UBER”.
Sobre el tratamiento y posible modificación de la ordenanza de remises, indicó que “se está esperando un informe del Colegio de Ingenieros, porque en la última reunión que se concretó, se había dicho que se debía tener en cuenta el tamaño del baúl por los equipos de gas”.
A la vez, comentó que también piden que “se tengan en cuenta los espacios entre asientos; ya que se habla de brindar un mejor servicio”.
Añadió que “la vida útil de los remises por ahora es de cinco años, pero se busca extender a siete años”.
Subrayó que “la idea es darle un respiro al propietario porque consideramos que siete años es el tiempo justo para que no se deteriore tanto el auto”.
Por último, recordó que “los taxis tienen una vida útil de diez años”.