El último jueves se aprobó en la Legislatura de Misiones el programa para la reconstrucción mamaria de forma gratuita, para quienes fueron sometidas a mastectomías. Y si bien en el Hospital Madariaga ya se realizaba esta práctica, ahora se cuenta con un marco legal para que todos los hospitales, clínicas, y obras sociales le den esta posibilidad a las mujeres de la provincia.
Pero la reconstrucción mamaria, desde un punto de vista psicológico, tiene un significado muy importante para el paciente, ya que en definitiva le permite retomar su vida de la forma más normal posible.
Primera Plana, programa de la 89.3 FM Santa María de las Misiones, habló al respecto con Marcelo Esteban Gatto, licenciado en Psicología y Magíster en Psicooncología de la Universidad Favaloro, además de codirector de la maestría en Psicooncología de la misma casa de estudior y creador del sitio web Psicooncología.org, escribió el libro “Pensar el Cáncer. Consideraciones desde la Psicooncología” donde expresa sus experiencias en este campo.
Gatto explicó que la mastectomía, en la mayoría de los casos, es una operación quirúrgica que afecta psicológicamente a las mujeres que padecen cáncer, especialmente a la hora de retomar sus vidas. Aunque de todas formas, resaltó que es importante no generalizar esto, porque si bien el diagnóstico de cáncer y sus consecuencias, como la quimioterapia o las cirugías, son situaciones de alto impacto, pero “cómo lo regula cada persona depende de los recursos que ésta pueda poner en funcionamiento para salir adelante, entonces en principio yo no generalizaría“.
Pero además resaltó que ante esta situación compleja, para el paciente tener algún tipo de reparación resulta muy importante. “Darles opciones de reparación a las personas, que estén al alcance de todas, me parece impresionante, fantástico”.
“Es interesante también ver que la paciente se va a someter a una segunda cirugía, y las características que tiene ésta, con todo lo que implica. Requiere un gran esfuerzo, paciencia y dedicación, pero para muchas personas esto es muy importante, es volver a hacer su vida y encontrarse a sí misma para rehacer su vida, porque aquí estamos hablando de la autoestima”, reflexionó el magíster.
El impacto desde lo psicológico
Marcelo Gatto explicó que cuando la integridad del cuerpo está amenazada, por una enfermedad grave como el cáncer, la calidad de vida disminuye a causa de síntomas emocionales como la depresión, la angustia o la ansiedad. “Cuando hay un diagnóstico de cáncer es como que el futuro se acorta. Uno nunca piensa que nos van a pasar las cosas que nos pasan, y cuando ocurren tenemos que vivir el día a día esperando resultados, esperando tratamientos, y esperando los resultados de los tratamientos. Esto acorta nuestra libertad y capacidad de vincularnos, influye en todas las áreas”.
También hay que tener en cuenta que como en cualquier cirugía, lo primero que se ve afectado es la imagen corporal, pero que además ésta en particular afecta a la identidad femenina de las pacientes. “En nuestra cultura, la mama tiene que ver con la sensualidad, el erotismo, la maternidad, y ese es el punto donde impacta. Entonces al tener vulnerada la imagen corporal, se genera un impacto en la autoestima, y al sentirnos heridos ahí, todo comienza a circunscribirse, nos sentimos más vulnerables, disminuye nuestro amor propio, nuestra confianza y nos vamos inhibiendo. Hacemos menos cosas, nos aislamos, nos queremos que nos vean así. Y si nos inhibe así en la vida con los demás, imagínense con la pareja. Por lo que la instancia de la reparación, y que sea accesible, me parece muy importante y saludable”, declaró Gatto.
Otro aspecto muy importante es el acompañamiento de los seres cercanos. Gatto detalló que el impacto del diagnóstico de cáncer, impacta obviamente primero en el paciente, “pero tiene una onda expansiva que implica al entorno, es un tema que no se sabe como manejar, no se puede mencionar, impacta poder decirlo así lisa y llanamente. Hoy en día, a pesar del gran porcentaje de curabilidad, todavía sigue costando mencionarlo o referirse en forma directa”.
De todas maneras, aclaró que no necesariamente todos los pacientes que tienen cáncer deben hacer terapia, ya que “primero habría que evaluarlos y ver qué recursos tiene cada uno para afrontar esta situación”.
Además resaltó que la evaluación es muy importante para ver por dónde se debe encarar la terapia. “La Psicooncología no es solamente hacer terapia, sino también tiene mucho de interconsulta, de asesoramiento, de esclarecimiento, y esto dependerá de la demanda, de como se constituya. El tema es generar los espacios en donde se pueda consultar, que haya en las instituciones espacios de salud mental para que naturalmente pueda surgir la demanda y ésta sea contenida”, mencionó.
Por último reconoció que para poder trabajar con personas que están en pasando por una situación difícil como ésta, es necesario para los psicólogos descargarse después de tratar a los pacientes. “Hacer terapia para un psicólogo es como para un cirujano entrar al quirófano y lavarse las manos, es parte de nuestra responsabilidad profesional. Para poder atender pacientes de cualquier tipo uno tiene que tener resueltas bastantes situaciones en la vida, sino se te empiezan a mezclar y vas a ser un mal terapeuta.” cerró.