Ya son habituales los reclamos respecto al funcionamiento del transporte urbano en Posadas. La falta de móviles sumada a la poca frecuencia de estos, genera un colapso en el servicio, especialmente en los horarios pico.
Alberto Penayo, director de la Defensoría del Pueblo, reconoció a “El Aire de las Misiones, que se emite por la 89.3 FM Santa María de las Misiones, que esta “es una demanda que tiene historia, no es una demanda que podamos decir tiene origen el año pasado, y conforme van pasando los años, y la población sigue creciendo, esta problemática también seguirá creciendo“.
De todas maneras, Penayo cree que esta situación amerita un análisis mucho más profundo. “No alcanza solamente con que nosotros y los medios lo marquemos, tiene que ser modificado el origen, y el origen de la modificación tiene que ver con una función y un rol bien taxativo que tiene Posadas, específicamente el área destinada para esto que es Transporte“.
Para el encargado de la Defensoría del Pueblo, el problema pasa en parte por no contar con los medios necesarios para poder llevar a cabo un correcto control del funcionamiento de las líneas. “En innumerables situaciones hemos remarcado y pedido mayor control, porque el problema es justamente quien controla a esa hora. Es imposible para un equipo de la Defensoría del Pueblo emitir una opinión concreta con respecto a ese tema, por la falta justamente de estructura para hacer semejante relevamiento.”
Además, para Penayo, se debe trabajar la posibilidad de generar algún mecanismo que permita una distribución más rápida de las líneas, y de esta manera evitar que la gente “viaje como ganado”. “El gran problema es la cantidad de unidades que se puedan poner disponible. Hemos visto que la línea 23 (Bencivenga), por ejemplo, refuerza en el horario pico, pero es la única No hemos visto que eso suceda con otras empresas”, reflexionó.
“Lo que propongo es la participación, que haya una mesa permanente y constante. Lamentablemente el año pasado no logré que el Intendente lo pudiera fijar nuevamente dentro del decreto, porque cuando lo solicitamos, nos incorporaron en una mesa donde podíamos sentarnos y conversar, pero eso lamentablemente no volvió a suceder en los otros decretos“.
Penayo resaltó además la importancia de dicha mesa de diálogo porque según sus palabras, “era una instancia donde íbamos con un relevamiento en la mano perfectamente definido, donde solicitábamos también por sector y después podíamos chequear, y así, en esa mesa uno podía sentarse a discutir el cumplimiento o no”.
“Ahora que va a haber un nuevo intendente, le vamos a proponer desde el minuto cero armar un esquema que permita a la Defensoría del Pueblo colaborar y buscar la mejor solución”. concluyó.