
El crimen que en 2015 conmovió a Puerto Piray y a toda la provincia, llegará a debate en las próximas semanas. De no mediar inconvenientes, los tres acusados por el crimen de la estudiante Miriam Cubas (16) comparecerán ante el Tribunal Penal 1 de esta ciudad. La fecha fijada es la del 10 de junio. Alrededor de 40 testigos están citados, por lo que lo más probable es que las audiencias se extiendan hasta fines del mes y los primeros días de julio inclusive.
El caso había sido elevado a juicio por segunda vez a fines de abril de 2018. Es que cuando el expediente llegó al Tribunal Penal por primera vez, los magistrados encontraron problemas en las indagatorias que se hicieron a los acusados: un joven que entonces tenía 19 años, apodado “Chinchulín” y dos adolescentes de 16 y 17 años. Por otra parte, no quedaba claro el relato de los hechos y si había sido uno el asesino o los tres.
En la etapa de instrucción, uno de los involucrados acusó a “Chinchulín” de haber sido quien atacó a la adolescente, desligándose él del crimen, como así también al tercero. Sobre este punto, en el debate se podrá dilucidar realmente cuál fue el rol de cada uno de ellos y si efectivamente el mayor fue el que mató a Miriam. En principio, tal como fue elevada a juicio, la acusación es por el delito de “homicidio agravado por alevosía, en concurso real de dos o más personas”.
El hecho
Miriam Cubas era estudiante del BOP 37 de Puerto Piray. Cursaba el cuarto año y asistía al turno tarde. A las 16.40 del 7 de abril de 2015 salió del colegio en dirección a su casa, ubicada a un kilómetro de allí, en el Barrio San José. En el camino debía pasar por un pinar, en el que circunstancialmente estaban los tres sospechosos.
En base a la reconstrucción que hizo la Policía y lo declarado posteriormente por uno de los detenidos se pudo reconstruir lo que ocurrió esa tarde. Uno de los menores relató que se había dirigido al barrio en busca de estupefacientes y allí se encontró con el mayor de los involucrados con quien planearon drogarse. En este sentido es necesario resaltar que uno de ellos había estado bajo tratamiento para superar las adicciones.
El menor que declaró oportunamente ante la Justicia, relató que cuando “Chinchulín” vio a la adolescente se abalanzó sobre ella, aunque no supo decir si era para violarla o intentar robarle. Según su relato, fue su “amigo” el que la apuñaló reiteradas veces y tras dejarla desangrándose le dijo que culpara al otro menor que también está imputado en la causa.
Posteriormente la autopsia reveló que Miriam recibió un primer puntazo en el abdomen, luego una segunda puñalada cerca del rostro y cuando se desvaneció, el o los asesinos le asestaron tres estocadas en la espalda. La adolescente murió a causa de un shock hipovolémico (desangramiento).