Lo hará de manera provisoria en el edificio de Pedro Morcillo 3065, entre Bosetti y avenida Blas Parera, hasta tanto se culminen las obras del edificio propio, en cercanías al Jardín Botánico.
El bachillerato contará con tres orientaciones, “Informática con especialización en robótica”, “Turismo con especialización en desarrollo sustentable” y “Agronomía con especialización en soberanía alimentaria” y las inscripciones estarán habilitadas en los próximos días con vacantes para primero y segundo año.
Miguel Sedoff, director de Plataforma Guacurarí y quien está a cargo del equipo que lleva adelante la iniciativa, explicó que “este proyecto nació como una manera de implementar en una institución educativa lo generado en quince años de políticas públicas orientadas a la innovación educativa desde lo metodológico, pedagógico y tecnológico. Fue una gran idea del presidente de la Cámara de Representantes, Carlos Rovira, llevada adelante por el gobernador, Hugo Passalacqua y la ministra de Educación, Ivonne Aquino.
En la escuela se implementará un modelo de Innovación Educativa que sea posible, replicable y escalable a todas las escuelas secundarias de la provincia. “Tomando como marco conceptual y legal la Ley de Educación Disruptiva, será una escuela que englobe las experiencias exitosas de la Plataforma Guacurarí y el modelo Flipped Learning y el trabajo y las exitosas experiencias de la Escuela de Robótica, incluyendo además como contenidos transversales los emanados de la Ley de Educación Emocional”, describió.
El proyecto de esta escuela, plantea además un nuevo modelo de gestión, con jornadas de seis horas donde los alumnos trabajarán por proyectos, por agrupamientos y materias. Se pondrá al estudiante en el centro del proceso de enseñanza aprendizaje y con él se buscará desarrollar sus competencias interpersonales, la autonomía, el espíritu crítico, la creatividad, la colaboración y el diálogo.
Así, las tres orientaciones del bachillerato se organizarán dentro de la estructura escolar en espacios flexibles de aprendizaje disruptivo y colaborativo y tres campus de trabajo dedicados a la robótica, artística y educación física y deportiva.
“Estamos haciendo una escuela que está dentro del sistema educativo de la provincia con un diseño curricular que respeta los contenidos nacionales y provinciales”, señaló Sedoff e hizo hincapié en que en los últimos quince años se llevaron a cabo muchas acciones tendientes a la innovación educativa, “llegamos hasta acá y ahora vamos a tratar de mejorar la escuela secundaria, porque a veces es un problema creer que la única manera de innovar es desde lo tecnológico, pensar que solamente hay innovación cuando cambiamos las computadoras, hay mayor conectividad o ponemos algunos dispositivos extraordinarios y novedosos; la innovación va muchos caminos y las más efectivas son las que se relacionan con la práctica educativa, la docente, con el cambio de la gestión de aprendizaje, con la formación docente, el trabajo colaborativo de los alumnos y la centralidad del estudiante en el proceso educativo, la búsqueda de alternativas para que la escuela sea un lugar atractivo y tenga una relación con la realidad de los estudiantes, que no sea algo completamente desconectado ni de lo novedoso, ni de lo significativo en el sentido que se experimente que la escuela es importante y es importante estar en ella”.
Aula Inversa
El Aula Inversa o Flipped Classroom es un modelo pedagógico que transfiere parte del proceso de enseñanza y aprendizaje fuera del aula con el fin de utilizar el tiempo de clase para el desarrollo de procesos cognitivos de mayor complejidad que favorezcan el aprendizaje significativo.
Se invierte de esta manera la forma tradicional de entender una clase: las actividades ligadas principalmente a la exposición y explicación de contenidos por el docente en clase se desarrollan fuera del aula, ya que en su casa los estudiantes ven videos grabados especialmente por sus docentes con el contenido de la próxima clase. Posteriormente, cuando van a clases, se produce una automática mejora en la calidad del tiempo de aula.
De esta manera se respeta el ritmo de aprendizaje de cada alumno, incrementando su motivación y aprovechando sus habilidades digitales.
Lo novedoso es que en la provincia desde hace aproximadamente quince años a esta parte se llevaron a cabo muchas acciones tendientes a la innovación educativa, tanto desde lo tecnológico como desde lo metodológico, contenidos, prácticas, experiencias entonces la idea del ingeniero Carlos Rovira fue plasmar en una institución educativa secundaria todos esos avances que hubo, hacerlos confluir en un mismo lugar.
“Misiones tiene una política pública educativa muy clara que viene llevando adelante desde hace quince años. Eso habla de un pensamiento estratégico muy claro de la conducción política que en todos estos años ha permitido la creación, el desarrollo y la permanencia de diferentes iniciativas de innovación educativa que colocan a la provincia en la vanguardia del país y el mundo”.
“Estos resultados desde un Estado no se obtienen si no hay expreso compromiso político con el futuro de los jóvenes y su educación y creo que eso es lo que distingue a nuestra provincia del resto”, agregó Sedoff.
El gran desafío será entonces crear una escuela que sea posible, escalable y que sea efectiva para mejorar los aprendizajes, es decir, no servirá a nadie plantear una escuela extraordinaria pero que esté alejada de la realidad, ya que estaríamos alejando a los jóvenes del sistema educativo en lugar de crear las condiciones para que permanezcan y crezcan como ciudadanos responsables y comprometidos.
La semana que viene se abrirán las inscripciones para primero y segundo año en la página de Plataforma Guacurarí www.guacurari.misiones.gov.ar.