Un bebé mbya de un año falleció producto de una severa deshidratación mientras oraban por él en el tempo sagrado (Opy) de la comunidad de Perutí.
La familia del pequeño vive en la comunidad Arroyo Anta, ubicada a unos 20 kilómetros de Montecarlo, y su mamá, preocupada por la salud de su bebé, decidió llevarlo hasta Perutí, en El Alcázar, para que allí lo viera el opyguá (chamán) y pudiera curarlo.
Según confirmó el responsable de Salud Indígena del Ministerio de Salud Pública a PRIMERA EDICION, Adrián Saldías, la comunidad Arroyo Anta no cuenta con promotor de salud en este momento porque el que tenía se mudó a otra aldea y lamentó que la mamá del pequeño se negara a que lo llevaran de inmediato al hospital.
“El bebé llegó a Perutí entre las 15 y 16 horas con un severo cuadro de deshidratación y pese a que el agente sanitario le dijo que debían llevarlo con urgencia al hospital, la mamá pidió que primero lo viera el chamán, lamentablemente el bebé murió en el Opy sin haber recibido asistencia médica cerca de las 22 horas. Incluso, el mismo opiguá le dijo a la mamá que él no podía hacer nada y que lo llevara al médico pero los padres seguían negándose a que lo llevaran al hospital. La cuestión cultural es una barrera en salud indígena, nosotros respetamos la cultura y creencias guaraníes pero muchas veces, cuando estamos ante cuadros agudos, lleva a un desenlace fatal”, detalló el funcionario.
El deceso se produjo el martes a la noche y, según constató luego un médico policial, la muerte del bebé fue debido a una deshidratación severa como consecuencia de un cuadro de diarrea.
Dos niños internados
Saldías confirmó que este es el primer óbito por deshidratación en la población infantil guaraní en lo que va del inicio de los días de altas temperaturas, “pero sí hemos tenido niños con estos cuadros que fueron atendidos e incluso han sido internados hasta su recuperación. En este momento, hay dos chicos internados en el Samic de Puerto Iguazú con cuadros de deshidratación, ambos están estables y en recuperación porque fueron derivados al nosocomio por los agentes sanitarios. Sobre todo en esta época del año, la recomendación a los agentes sanitarios es que estén muy alertas a este tipo de cuadros, sobre todo en bebés y ancianos”, destacó.
Según indicó Saldías, “generalmente, la internación de los niños guaraníes se extiende un poco más para que vuelvan a sus comunidades sin ningún riesgo”.
Pasos para la prevención
La diarrea es una enfermedad que afecta especialmente en esta época estival y puede ser fatal para los niños más pequeños y adultos mayores pues se deshidratan en pocas horas.
Por ello, los médicos recomiendan no exponerse al sol en horarios picos (de 11 a 16), beber suficiente agua (entre 2 a 3 litros), respetar la cadena de frío de los alimentos, lavar correctamente las frutas y verduras.
Al respecto, según indicó la licenciada en nutrición Jenifer Zimmermann, “para prevenir la deshidratación hay que tener en cuenta la ingesta de agua y si el niño ya está deshidratado, darle sales de hidratación, siempre y cuando el agua que estén utilizando para diluir las sales sea segura. No hay que esperar a tener sed para tomar agua porque tener sed es ya un síntoma de deshidratación”.
Destacó además que no es aconsejable el consumo de bebidas azucaradas, “si los padres las consumen, obviamente los chicos también van a quererlas en vez de agua. Una alternativa es exprimir una naranja o unas rodajas de limón en una jarra con agua para darle sabor”, señaló.