“No puedo creer que ésto le esté pasando a mi hija. Estaba sana hasta un día antes”, denunció Luis Gilardoni a PRIMERA EDICIÓN. Su hija, Yamila, está internada en terapia intensiva del Hospital Madariaga con un cuadro de meningo encefalitis autoinmune pero el diagnóstico tardó una semana: comenzó con dolores de cabeza y de nuca pero los médicos que la atendieron la medicaron por esquizofrenia, trastorno bipolar, brotes psicóticos y maníacos durante toda una semana. La familia los denunció por mala praxis.
PRIMERA EDICIÓN habló con su papá minutos después de escuchar el parte médico de Yamila este miércoles por la mañana. “Es muy grave la situación”, indicó. “No podemos entender cómo estos dos médicos dejaron pasar una semana dándole cocteles de cosas sin hacer ningún estudio, nunca le hicieron un análisis”, agregó.
Todo comenzó el sábado 17 de septiembre. Yamila comenzó con dolores de cabeza y de nuca y, por precaución, se dirigió al CAPS de Bonpland, localidad donde reside. “El médico, sin ser psiquiatra, le diagnosticó un cuadro psicótico y la derivó al Hospital Ramón Carrillo de Posadas”, relató su papá. Otros de los síntomas que manifestaba la joven, de 23 años, fue que empezó a desvariar y a desconocer a la gente. Más tarde, su familia se enteraría que éste es uno de los síntomas de la meningo encefalitis.
En el Carrillo “es recibida por otra irresponsable en la guardia”, señaló Gilardoni en referencia a la médica que la atendió y le diagnosticó “esquizofrenia, trastorno bipolar, brotes psicóticos y maníacos por lo cual la medican”, relató su padre “todo sin hacerle ningún estudio”. La medicaron y la enviaron a su casa “porque decían que necesitaba descansar”. Como el estado de Yamila no mejoraba, el lunes 19 la vuelven a llevar para que la vean “y la médica dijo que seguía igual” por lo que “aumentaron la dosis del cóctel de pastillas más inyección con depósitos. Debía tomar con el desayuno, almuerzo, merienda y cena sí o sí”, contó Gilardoni. La volvieron a citar para el jueves y “entre las indicaciones ella debía dormir mínimo tres días. Pensamos que estaba re complicada y las seguimos al pie de la letra”.
Sin embargo, el estado de Yamila no mejoraba. El jueves “sin haber pedido ningún tipo de estudio previo la internaron en el Carrillo” y la situación empeoró: Yamila comenzó con convulsiones. “En una se quedó toda blanca, fue desesperante, le gritaba que respire. Recién ahí decidieron trasladar a Yami al Madariaga”. Recién el sábado 24 de noviembre, en dicho hospital, le hacen los primeros estudios y la familia recibe el diagnóstico: meningo encefalitis autoinmune. “Ese debería haber sido su diagnóstico desde un principio. Una semana se perdió”, afirmó el padre.
En este momento el estado de Yamila es desesperante: se encuentra en coma inducido en terapia intensiva del Hospital Madariaga y su familia está desolada por la impotencia. “Cualquier medico que haya ganado su título estudiando debería saber que los síntomas de está enfermedad se manifiestan con fuertes dolores de cabeza y brote psicótico. También debería saber que primero se debe pedir una tomografía, análisis clínicos, resonancia magnética para descartar un cuadro clínico y luego todo lo demás. La vida de Yamila perdió una semana valiosa por mala praxis”, afirmó su papá quien este miércoles por la mañana se acercó a la Comisaría Décima para realizar una denuncia contra los dos médicos que la atendieron acusándolos de mala praxis y abandono de persona.