La Policía de Paraguay está envuelta en un escándalo después de que se descubriera que 42 fusiles habían sido robados de una comisaría e intercambiados por réplicas de juguete.
El ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, anunció que su cartera trabaja con la Fiscalía para determinar las circunstancias del robo. Calificó de “grave” la situación ya que las armas podrían ir a parar a manos de delincuentes internacionales.
Las réplicas, de madera y plástico y poco parecidos a los fusiles de gran calibre FN FAL originales, hicieron que algunos medios calificaran el suceso como el “escándalo más vergonzoso” en la historia del cuerpo policial del país.
Los originales podrían llegar a valer casi mil dólares y se sospecha que algunos podrían encontrarse en Argentina o Brasil.
Habían sido llevados al depósito dado que estaban siendo reemplazados por otros más modernos, pero seguían operativos. El agente al cargo de dicha armería fue relevado de su puesto.
Fuente: Medios Digitales