En este contexto, los centros de investigación y desarrollo del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) Misiones e INTI-Agroalimentos llevaron adelante un extenso estudio de caracterización del té que se produce en Misiones. Se visitaron 17 establecimientos, entre empresas y cooperativas, y en ellos se tomaron 89 muestras de distintos tipos de té negro y verde.
El objetivo fue caracterizar en el té su composición química, compuestos bioactivos, sus características sensoriales y determinar así su calidad, teniendo en cuenta estándares internacionales.
Esta iniciativa se llevó adelante con el apoyo del Ministerio de Producción de la Nación, el Ministerio de Industria Provincial y el Clúster del Té de Misiones.
En este sentido, el subsecretario de Planificación Industrial del Ministerio de Industria, Roberto Tarnowski, manifestó que “nuestro té es de altísima calidad”. Por ende, alientan a las PyMEs y las cooperativas a “incursionar en nuevas propuestas de manera asociativa para ganar mercado”, resaltó el funcionario en una entrevista con LT 17 Radio Provincia. “Apuntamos al agregado de valor en las producciones tradicionales de Misiones y a desarrollar alternativas para productos locales. Todo esto haría que la economía pueda tener mayor diversificación”, sentenció.
En esa línea, el funcionario se refirió al clúster del té, organizado en el 2002 , que opera en la ciudad de Oberá donde prevalecen los secaderos que se dedican al tipificado, a la exportación y a la producción del té envasado en saquitos.
Tradicionalmente un 95% del volumen total del té producido en Misiones es exportado a Estados Unidos, donde se usa como base en la elaboración de té helado o ‘ice tea’, como allí se conoce.
“Esto condiciona mucho la producción primaria porque se define un precio hasta agotar el stock de un techo internacional”, explicó Tarnowski .
Precisó que esta situación genera incertidumbre, ya que si bien hay un Consejo Provincial del Té que establece precio, “existe un mercado internacional que hace que los valores no se cumplan”.
En consecuencia, indicó que “para evitar la presión de los mercados internacionales, apuntan a encontrar nuevos, donde el valor no se establezca por commodities, para obtener así una mayor rentabilidad para las empresas y obviamente también trasladar un mejor precio al productor primario”, subrayó.
Para ello, detalló que el trabajo del INTI surgió de la propuesta para “diversificar los productos que se elaboran en la provincia, y no hacer todo para el mercado de té frío”.
“Hay tres empresas que se encuentran desarrollando nuevos diseños de packs y nuevos blends de productos con distintas variedades”.
“Tenemos un proyecto para hacer extracto de té con una fábrica del sector citrícola, se trata de un producto con mucho más valor agregado que el tradicional, y que además consumiría toda la producción”, contó. Para finalizar, manifestó, que los productores “deben abrir el abanico a otras oportunidades a otras demandas del mercado internacional, que no solamente buscan el té negro, sino el té verde, el té con distintas mezclas de infusiones, con frutos rojos y otras variedades”. “Estamos brindando asistencia técnica para que las PyME y cooperativas puedan empezar a incursionar en otras opciones y ganar mercados”, concluyó.