El hecho sucedió el pasado 25 de diciembre y si bien radicaron la denuncia no hubo avances para detener a los responsables.
En diálogo con este Diario, el hombre relató que en las primeras horas de la pasada Navidad, su hijo tenía intenciones de tomar el colectivo para dirigirse a la casa de un familiar.
Como la parada queda a pocos metros, el joven se encontraba en el frente de la vivienda a la espera de la unidad de transporte. En un determinado momento se acercaron cuatro sospechosos que, según indicó, en el barrio son conocidos por formar parte de una banda que habitualmente tiene problemas con la ley.
Sin mediar palabra se abalanzaron sobre el joven y comenzaron a agredirlo por lo cual este corrió hacia la casa. Los agresores intentaron meterse y doblaron a patadas una puerta de metal. Uno de ellos metió la mano por la ventana, tumbó y destrozó un televisor de 32 pulgadas.
El padre del joven al intentar evitar que ingresaran recibió un golpe de puño en el rostro. Cuando se iban, arrojaron proyectiles que rompieron los vidrios de la casa, relató el dueño de la propiedad.
Posteriormente se comunicó con la seccional Quinta y personal de esa dependencia se dirigió al lugar a constatar el hecho, tomar imágenes de los destrozos y realizar las pericias de rigor.
A casi 40 días del hecho reclamó: “Queremos que los responsables sean detenidos por la agresión que sufrimos y paguen por los destrozos que provocaron”, señaló el damnificado.