POSADAS. Mientras las muertes de Mabel González (27) y Yanina Galarza (20) en manos de un desaprensivo conductor sobre la exruta provincial 213 aún golpean a la sociedad local, los números indican otra triste realidad: en esa misma avenida perdieron la vida ocho personas en los últimos tres años. El número es todavía mayor si se suman las víctimas registradas sobre avenida Quaranta, el viejo trazado de la ruta nacional 12.Son esas las dos avenidas donde se produjeron más muertes por el tránsito en Posadas durante los últimos tres años. Y más allá de las responsabilidades de los involucrados, al menos en lo que respecta a la avenida Alicia Moreau de Justo queda en evidencia el abandono y la desidia del Gobierno provincial a la hora de brindar una solución efectiva en relación con dicha infraestructura.“Toda la obra está mal hecha, los colectivos deberían andar por las colectoras, pero no lo hacen porque están mal hechas y ni siquiera se terminaron; se detienen en la avenida, que no es tan ancha para que lo hagan y así pasan los accidentes todos los días”, le dijo Fabián Kakuk, vecino de la zona, a PRIMERA EDICIÓN, en un informe especial publicado el último miércoles.La de Kakuk es una de las tantas voces que reflejan el pensamiento de casi todos los que día a día transitan por la exruta provincial 213. El trazado es angosto y los espacios no fueron bien utilizados. La congestión en “horas pico” es evidente y la consecuencia, también: ocho víctimas en poco más de tres años, a razón de casi tres por año. Demasiado para una arteria que no llega a los tres kilómetros de diámetro en el sector de análisis.Justamente una situación similar a la que planteó el vecino sucedió el jueves 14 de noviembre del año pasado, cuando un motociclista de 19 años murió al estrellarse contra un colectivo en Moreau de Justo y Salvador Mazza. Fue una muerte que quizás pudo haberse evitado con otra planificación de la calzada.Lamentablemente, aquel deceso fue un aviso, una advertencia que sigue vigente y por la que poco pareciera haberse hecho. También lo fue la muerte de una mujer de 44 años el lunes 11 de agosto de 2014. Esperaba el colectivo en la exruta 213 y Jesús de Nazareth cuando fue embestida por una camioneta.El hecho provocó la reacción de los vecinos y la instalación de semáforos. Sin embargo, “en todo momento pasan en rojo”, le contó otra vecina el último miércoles a este diario.Los habitantes de la zona coinciden en que faltan controles, como los que podrían haber evitado el deceso de González y Galarza hace ocho días, cuando fueron embestidas por el VW Golf de Gonzalo Slámovits (32), quien viajaba alcoholizado y a más de 120 kilómetros por hora.Es cierto. Junto con el contralor estatal también es necesario un cambio cultural de toda la sociedad. Son factores importantes, pero parecieran no complementarse con una vía totalmente saturada y planificada erróneamente, como advierten los propios vecinos. “Se planificó mal, las calles tendrían que ser más anchas; las colectoras son angostas, entonces nadie las usa”, dicen.Desde la Dirección Provincial de Vialidad se aseguró que están previstas algunas obras de mejoramiento, como la construcción de varios puentes aéreos. Para muchos, la verdadera solución sería la de “comenzar de vuelta” y reconstruir el trazado de nuevo.Sobre la avenida Quaranta, resulta ser la más peligrosa de Posadas, según los números. Entre 2012 y los últimos días murieron 17 personas en la “travesía urbana” que va desde la intersección con el Acceso Oeste y la rotonda de la avenida Uruguay.Está claro que la enorme cantidad de vehículos que transitan por la zona a diario la convierten en un lugar de extremo cuidado, pero es quizás lo opuesto a la exruta provincial 213, debido a que cuenta en toda su longitud con cuatro vías de ancho correspondiente y banquinas terradas de espacio. Así y todo hubo muertes, pero pudieron haber sido más.La lista de avenidas peligrosas en Posadas no se limita a las dos ya mencionadas. La avenida Cocomarola, otra arteria cuestionada por los vecinos de la zona, se cobró siete vidas en apenas tres años, mientras que en igual lapso la Cabo de Hornos terminó con seis muertes.Hacia el norte de la exruta nacional 12, en tanto, en la avenida Chacabuco perdieron la vida cuatro personas, mientras que por Urquiza se produjeron tres decesos, al igual que en la avenida San Martín. También hubo tres decesos en avenida Uruguay y también tres sobre Tomás Guido, cuestionada por los habitantes de la zona en virtud del trazado irregular que se observa casi en toda su magnitud.





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