El lugar no estaba desordenado: sólo rompían la normalidad los cadáveres de Lidia Bezus de Kosakzuk (69) y de su hijo, Diego Kosakzuk (29), con evidentes signos de haber sido ejecutados a tiros y con heridas en distintas partes del cuerpo, como si hubieran intentado defenderse o si el o los asesinos, antes de apretar el gatillo, hubieran decidido torturarlos.
Ambos se ganaban la vida como colonos y residían solos en la humilde vivienda que se convirtió también en escenario de su muerte.
Ocurrió entre las 8 y las 9 del jueves 16 de julio de 2015 en una vivienda del paraje Samambaya, a unos ocho kilómetros de la zona urbana de Los Helechos. Y un vecino fue quien se topó con el macabro: el joven sin vida, tendido en el patio de la casa, en tanto que en una de las habitaciones fue hallada su madre, también fallecida.
La autopsia determinó que Diego Kosakzuk presentaba “orificio de arma de fuego en pectoral izquierdo y otro a la altura de la ceja, ojo derecho”, mientras que Lidia Bezus tenía “hundimiento de cráneo producto de un golpe y dos orificios de arma de fuego en región frontal”.
La secuencia de lo sucedido apuntaba a que el primero en ser atacado fue el joven, mientras que su madre desesperada habría tratado de ocultarse de los delincuentes encerrándose en su habitación y hasta se estima que intentó no ser descubierta metiéndose debajo de la cama. Sin embargo,los criminales no tuvieron piedad de ella tampoco y la ejecutaron con los balazos en la cabeza.
Las pericias abonaron la teoría de que los autores del hecho buscaban 40 mil pesos que madre e hijo habían cobrado días antes, pero alguna teoría también apuntaba a una venganza debido a que Kosakzuk había declarado en contra de uno de los presuntos autores unos tres años antes, tras un robo de yerba mate perpetrado en una chacra de la zona.
Finalmente el Tribunal Penal 1 de Oberá condenó a los dos acusados del doble crimen, Sergio Elías Machado (28) y Jorge Miguel Chiluk (28), a 35 años de prisión por “robo calificado por el uso de arma de fuego en despoblado y en banda; y doble homicidio calificado para lograr la impunidad”.










