Días atrás se registró la mañana más fría en lo que va del año la que marcó el inicio de una semana complicada para la producción misionera. Las heladas blancas cubrieron los suelos rurales y urbanos de la provincia, y si bien ya pasaron varios días, los efectos todavía se sienten.
Para conocer el impacto, FM 89.3 Santa María de las Misiones entrevistó a Otto Goritz, subsecretario de Desarrollo Productivo de Misiones, quien explicó que el fenómeno afectó a varios cultivos, principalmente los más vulnerables por estar al aire libre.
“El descenso brusco de la temperatura fue muy fuerte, sobre todo en la zona centro. Registramos hasta -7°C a ras del suelo con geotermómetro, que mide a nivel de cultivo”, indicó.
Los cultivos más afectados fueron los de hoja, como lechuga, acelga y repollo. “Generalmente son tolerantes, pero esta vez fueron fuertemente golpeados”, señaló. La helada cristalizó el agua de las hojas y rompió las estructuras celulares, provocando pérdidas totales en la mayoría de los casos.
“En El Soberbio fue fuertísimo. Las hojas estaban totalmente congeladas, se quebraban. Cuando eso pasa, no hay recuperación posible”, dijo el funcionario. En algunos productos como el repollo, dependiendo del daño, puede rescatarse parte del corazón, pero su valor en el mercado cae debido a la pérdida de estética y al riesgo de descomposición acelerada.
En cuanto al abastecimiento, Goritz explicó que “el faltante se notará más en ferias locales, no tanto en grandes verdulerías que tienen otras fuentes de abastecimiento”. Sin embargo, advirtió que “la baja de calidad también puede hacer caer los precios”.
Consultado sobre si se esperan más heladas, respondió que “es difícil saberlo con certeza. Se habló de La Niña, pero hubo una tematización extraña, descontinuación de su efecto, una sequía que no llegó o llegó mal, después lluvias… todo es muy complejo”.
Recomendaciones para proteger cultivos
A pesar de no poder confirmar si habrá nuevas heladas, Goritz recomendó cubrir los cultivos con telas especiales o generar calor en los extremos de las huertas. Para invernaderos, aconsejó el uso de estufas para mantener la temperatura. “La variación brusca también afecta adentro del invernadero, hay que prender estufas para mantener el rendimiento”, señaló.
También hizo hincapié en la planificación de chacras, con elección de zonas menos expuestas a las heladas. “El productor que conoce su lugar sabe dónde pega menos la helada”, dijo.
Respecto a la posibilidad de asistencia técnica, mencionó que desde la subsecretaría trabajan constantemente con instituciones como el INTA para capacitar y ayudar a los productores. Sin embargo, reconoció que para muchos pequeños productores, las soluciones como invernaderos son inalcanzables por su alto costo.
Impacto positivo en cítricos
No todos los efectos fueron negativos. En el caso de los cítricos, la helada favorece la dulzura de frutas como la mandarina.
“Esto es así, sobre todo la mandarina común. También tiene que ver con la cantidad de horas frío acumuladas que estimulan la producción y la dulzura. Los cultivos tienen memoria y responden a eso”, explicó Goritz.
Tabaco, uno de los cultivos más perjudicados
Consultado sobre cultivos clave para la provincia como yerba, té y tabaco, Goritz fue contundente: “La yerba y el té no fueron afectados de manera significativa. Pero el tabaco sí. En zonas como El Soberbio se quemaron muchas plantas y eso es pérdida total”.
“El tabaco requiere mucho esfuerzo, dedicación y tiempo. Y cuando se quema, ya no hay recuperación”, lamentó.
Finalmente, Goritz pidió que se valore el trabajo del productor misionero y que se tenga en cuenta la vulnerabilidad frente a fenómenos climáticos.
“El agro es increíble, pero es muy difícil planificar con certeza. Hay muchas variables y las pérdidas se sienten profundamente en el esfuerzo de cada familia productora”.




