Un nuevo aniversario se cumple este viernes del crimen de Solange Grabenheimer, la joven estudiante de 21 años que el 10 de enero de 2007 fue hallada asesinada en su casa de Vicente López (provincia de Buenos Aires.
Su mejor amiga y con quien convivía, Lucila Frend, fue la única acusada, pero fue absuelta por falta de pruebas, por lo que la causa prescribió sin ningún condenado.
El reclamo, pese al cierre de la causa, continúa latente a 17 años de su asesinato en busca de obtener respuestas sobre quién mató a Solange.
El cuerpo de Grabenheimer fue hallado el 10 de enero de 2007 en su domicilio, ubicado en la calle Güemes 2.280 en Vicente López, con cuatro puntazos en el cuello. La autopsia reveló que murió por un paro cardiorespiratorio traumático debido a ingreso de sangre en vía respiratoria que le provocó un shock hipovolémico.
Tras una larga investigación, el fiscal Alejandro Guevara acusó a Lucila Frend de ser autora del crimen de su mejor amiga y recién en 2011 comenzó el juicio oral en el Tribunal Oral en lo Criminal 2 de San Isidro.
Durante el transcurso del debate, Frend negó rotundamente su participación en el asesinato y ratificó su inocencia. Tras un largo mes de audiencias y declaraciones, el 12 de julio de ese año el Tribunal, de manera unánime, dictaminó absolverla por falta de pruebas.
En 2013 recién se volvió a hablar del caso cuando el Tribunal de Casación Penal bonaerense confirmó la absolución de la joven y el caso, sin ninguna resolución, quedó prescripto en enero de 2022.
Desde España, donde actualmente vive, Frend envió en 2022 una carta a un medio argentino donde expresó su enojo por la falta de justicia y la necesidad de impulsar una nueva investigación.
“Hoy es un día muy triste y amargo para mí y para todas las personas que queríamos a Sol y que hace 15 años esperamos justicia. Más frustrante aún es saber que pese a todos los esfuerzos míos personales y de mi familia y nuestro abogado y amigo, el Dr. Francisco García Santillán, por impulsar una nueva investigación, un nuevo fiscal, nada de eso se logró”, manifestó.
“Me sigo preguntando por qué tuvo que pasar esta pesadilla… Sol era mi gran amiga, la quería muchísimo y le sigo pidiendo que me dé fuerzas en los momentos más difíciles, como hoy”, concluyó.
Se trató de la primera vez que la única acusada que tuvo el caso habló acerca de la investigación y del calvario vivido a lo largo de la pesquisa.
Fuente: agencia Noticias Argentinas