Representantes de los diferentes sectores de la cadena productiva tabacalera se reunieron en el Ministerio del Agro y la Producción (MAyP), para empezar a debatir los costos para el precio del tabaco para esta temporada. Con una proyección que supera los 32 millones de kilos, y con un contexto cambiario favorable, la reunión fue un primer encuentro más que positivo, según manifestaron los protagonistas.
“La primera reunión fue más que nada para conocer el costo de la canasta de insumos de las empresas para esta zafra, saber un poco la cantidad de kilos exactos de proyección, siempre hablamos de una proyección, porque de acá hasta que comience el acopio o que termine el acopio en sí, siempre puede variar por las inclemencias del tiempo”, indicó a los medios el director de Tabaco de la Provincia, Christian Gluge, una vez finalizado el encuentro.El funcionario explicó que estiman una producción aproximada de 32,5 millones de kilos de tabaco Burley, acompañados de 300.000 kilos de tabaco criollo misionero y 10.000 kilos de tabaco Virginia. Este aumento, afirmó, es significativo en comparación con los 28 o 29 millones de kilos registrados en años anteriores.
Gluge contrastó el escenario actual con lo sucedido en la campaña pasada. “El año pasado estuvimos castigados un poco por el tiempo, después por el sistema cambiario, por lo que terminó yendo mucho tabaco a Brasil en forma ilegal y eso hizo que tuviéramos una zafra, diría yo, de las peores de la historia”, aseguró.Este año, no obstante, estiman que se perdió una ínfima cantidad de producción respecto a lo esperado, en casos muy aislados. Sumado a esto, la estabilidad del peso, más la devaluación del real, hizo que muchos productores registraran su tabaco.“Lo bueno es que hay una proyección de 32 millones de kilos, un poco más todavía.
Vamos subiendo porque hay un buen producto este año y yo creo que va a haber un poco más de volumen de lo esperado”, resaltó, a su vez, el presidente de la Cámara de Tabaco de Misiones (CTM), Gustavo Piñeiro.El clima ha jugado un rol crucial en esta mejora. Mientras el año pasado las condiciones adversas y el contrabando hacia Brasil afectaron la cosecha, este año el panorama es distinto. “Venimos de un año de buena producción”, destacó Gluge, aunque advirtió que las inclemencias climáticas aún podrían alterar la cifra final.
Dependencia del clima
El inicio del acopio está condicionado por el clima. Las empresas necesitan un volumen significativo para abrir el proceso, y las lluvias previstas para finales de enero son fundamentales para que los productores “enfarden” su tabaco.
Eso también permitirá fijar un precio más acorde al contexto cambiario que haya cuando esto suceda, por lo que esperarán estos acontecimientos climáticos para fijar el precio.
“Después del día 28 vamos a hacer una reunión especial. Si las condiciones del clima favorecen antes, se va a hacer antes, pero está previsto para fin de mes y, en definitiva, para ir cerrando ya un precio, para que el productor pueda vender su producción”, advirtió el subsecretario de Tabaco del MAyP, Carlos Pereira, en referencia a la fecha de la próxima reunión de la mesa tabacalera.
Negociación y mercados
La mesa aún no logró acordar un precio ya que depende de varios factores: el costo de producción, el tipo de cambio y el mercado internacional. El año pasado, la mejor clase de tabaco, que sería el B1F, perteneciente a la variedad Burley se vendió a 2.500 pesos por kilo.
“Entonces, a raíz de eso tenemos que ver el índice inflacionario, el costo de producción, el tipo de dólar que vamos a tener en el momento de la apertura del acopio o en el momento del cierre del precio del tabaco. Esas son las condiciones que tenemos que jugar en el precio”, indicó Gluge.
“Nos basamos mucho en el costo de producción, inflación y otros factores para negociar. Hasta ahora, tenemos los números de Massalin, pero faltan los de la Cooperativa y Alia. Sin esos datos, no podemos avanzar”, afirmó Piñeiro, por su parte.
La reunión del 28 de enero será clave para cerrar los precios. Al respecto Gluge señaló que, “el productor siempre quiere cobrar más y está en su derecho. Desde el Gobierno, buscamos que el precio sea lo más justo posible”.
En esa línea, agregó que no deben descuidarse de las ofertas del mercado internacional. “Sabemos de que no solamente nosotros, los misioneros, tenemos buena cantidad de producción de tabaco, sino que Brasil va a producir alrededor de 55 millones de kilos de tabaco Burley”.
En este país, el año pasado, habían producido la mitad de volumen que este año. “Malawi en África también produce tabaco y retomó la actividad con todo un trabajo parecido a lo que se hace en Misiones, o sea que hoy tenemos más competencias que años anteriores” apuntó.
Por otro lado, Brasil ya comenzó su acopio con precios del año pasado, y se espera un aumento del 4% al 6%. Pero a pesar de todo esto, el titular de CTM fue contundente: “Ya lo dijimos, si venimos a otra reunión, ya tiene que aparecer números sí o sí. El que no tiene números creo que ese no tiene necesidad de venir y tampoco de estar, porque no tiene sentido”, aseveró.
No obstante, las empresas en Misiones tienen asegurada la compra de los 32 millones de kilos proyectados. Cada una ya ha establecido sus objetivos, con CTM liderando con 10,5 millones de kilos, seguida por Massalin particulares con 8,5 millones y Alia con 3,4 millones.
El FET
Un volumen mayor de producción beneficiará directamente al Fondo Especial del Tabaco (FET), según Piñeiro. “Si tenemos más de 32 millones de kilos, podemos quedar segundos o primeros a nivel nacional. Esto sería un gran logro para Misiones”, indicó.
La garantía de compra por parte de las empresas y el compromiso de los productores auguran un cierre exitoso para la zafra y, por consiguiente, en el esperado retorno, que el año pasado estuvo muy por debajo de los niveles habituales. “Eso no quiere decir que tienen los 32, puede ser que suba o puede ser que baje un poquito cuando se finaliza el acopio, pero eso lo veremos cuando se termina la compra”, remarcó.
La producción tabacalera en Misiones parece estar encaminada hacia una de sus mejores temporadas recientes, aunque las inclemencias climáticas y las fluctuaciones del mercado internacional podrían modificar las expectativas iniciales.
La próxima reunión, del 28 de enero, será decisiva para definir los precios y descomprimir el complejo presente que atraviesan las chacras misioneras.