Con una victoria 1-0 este domingo ante el Ajka, el Győri ETO FC, equipo en el que milita el misionero Luciano Vera, logró el ascenso a la primera división de Hungría, después de nueve años de ausencia.
Los Győrs necesitaban al menos un empate en su visita al Ajka, lo que hizo que pudieran plantear el partido de forma cómoda y jugando a la contra.
La táctica funcionó a la perfección, ya que a los 25 minutos logró adelantarse en el marcador cuando el brasileño Riquelme Rodrigues mandó a la red un disparo a corta distancia tras un rechace del arquero rival.
Luego el equipo de Vera pudo sostener el resultado y sellar así el ascenso, lo que desató un festejo eufórico donde el misionero terminó ovacionado por parte del público que se acercó al estadio y por sus propios compañeros.