Se escondió en la escuela de una iglesia evangélica de Capioví, suplicó que la dejaran vivir o quedarse allí hasta que la madre la rescatara pero que no la llevara nuevamente a la casa donde su padrastro la obligaba a mirar videos pornográficos y abusaba sexualmente de ella.
La víctima tenía solo 9 años el 19 de agosto de 2022 cuando rompió el silencio y pidió ayuda. Su progenitora la puso a resguardo y radicó la denuncia y en pocas horas fue detenido su entonces concubino, un changarín de oficios varios de la zona.
Esta semana, el acusado de “abuso sexual simple, varios hechos indeterminados, abuso sexual con acceso carnal, todos agravados en concurso real y en concurso ideal corrupción de menores (artículo 119 del Código Penal Argentino, primer párrafo, segundo párrafo, tercer párrafo y cuarto párrafo, inc B y F, en función de los artículo 55 y 125 3er párrafo)”, aceptó con el asesoramiento de la defensora Liliam Teresita Inés Belloni, el acuerdo de suspensión por juicio abreviado, reconoció la autoría de los delitos contra la integridad sexual y firmó una condena de 14 años de prisión efectiva.
La acusación y ofrecimiento de monto de pena correspondió al fiscal de Tribunal Penal 1, Martín Alejandro Rau y restará la audiencia de visu para el encartado con los jueces respectivos para homologar la sentencia.
Con la ejecución penal del hecho podrán la víctima y su familia recomponerse de los hechos denunciados y elevados a debate oral por el Juzgado de Instrucción de Jardín América.
Según los elementos que obran en el expediente al que PRIMERA EDICIÓN tuvo acceso, los delitos que reconoció al acusado (hoy de 43 años) se iniciaron como abuso sexual simple, tocamientos y manoseos genitales, que no tardaron en agravarse con la exhibición de pornografía reiteradamente a la niña en el kiosco que él atendía y “para que ella aprendiera”, según los testimonios y evidencias volcados en el expediente que instruyó el juez Roberto Sena.
La violencia aumentó y la menor fue violada por la persona que debía cuidarla mientras su madre trabajaba. Los abusos con acceso carnal fueron reiterados.
Más detalles sobre el expediente, este Diario se reserva su publicación para evitar la revictimización de la menor involucrada y su contexto familiar.
Hace poco más de una semana y durante la audiencia de visu del changarín con su abogada y el fiscal Rau, se leyó la acusación y no hubo oposición a la calificación legal y al monto de pena respectivo. El encartado comprendió la gravedad de los delitos que cometió y rubricó conforme el acuerdo.