La frontera seca que separa la ciudad misionera de Bernardo de Irigoyen y las brasileñas de Barracão y Dionísio Cerqueira tiene sus particularidades. De un lado al otro, se puede cruzar caminando y todos se conocen, debido a la creciente relación comercial formal e informal entre países.
Pero en los últimos años aumentó la preocupación debido a la cantidad de crímenes, relacionados a ajuste de cuentas, venganzas o juegos de poder que requieren de la contratación de sicarios. En tres años, nueve personas fueron ejecutadas y ningún caso tuvo esclarecimiento hasta el momento.
El último caso todavía está fresco. César Alexander Caytano (23) se dedicaba al comercio informal de divisas en la frontera argentina-brasilera, y el jueves 8 de febrero encontró su muerte. Tres encapuchados aparecieron en un domicilio del barrio Vista Alegre, y fue ultimado de cinco tiros. Recibió disparos en el pecho, en el cuello y en el rostro, según fuentes policiales.
En la secuencia de video, de una cámara de seguridad de la casa, se observa a Caytano y a otro joven con sus respectivos celulares, mientras los sicarios aparecen de forma sorpresiva y acaban con su vida. Pero, lo llamativo fue que, minutos antes, también estaba la pareja dueña de casa, compartiendo bebidas con ambos. Estas dos personas, un hombre de 23 y una mujer de 28 años, hoy son las únicas demoradas y se esperaba que en indagatoria puedan aportar datos de lo ocurrido aquella noche y por qué se borró o desapareció parte del material fílmico.
Temor en la comunidad irigoyense
Sobre el caso también opinó el intendente de Irigoyen, Edgardo “Chichín” Aquino, quien lamentó esta situación “muy triste para nuestra comunidad” y, a la vez, “nos tiene muy preocupados a todos”.
En diálogo con Canal 9 Norte Misionero, Aquino comentó que la noticia tiene en vilo a la comunidad y “que no aparezcan los responsables es lo que más preocupa, porque nos hace parecer como una zona de total inseguridad y tierra de nadie”, dijo. A pesar de que cada organismo hace el seguimiento que corresponde, “lamentablemente no se llega al hilo de la cuestión”.
La impaciencia de los irigoyenses llegan a los oídos del jefe comunal, quienes reclaman “por qué no se esclarece nada, en absoluto, más allá del esfuerzo en las investigaciones”. En esa línea, contestó que “a veces hay que ser cuidadosos en verter opiniones, porque para eso está la Justicia”.
Ante la consulta de si la ejecución de Caytano está relacionado a algo ilegal, dijo que “la verdad es que es imposible de dilucidar, pero queda claro que no es un asalto y no es un robo”, aseveró.
Resistencia de las fuerzas brasileñas
Sobre este último caso, sumó que “hay un trabajo en conjunto, hay acuerdos (…) pero creo que el trabajo que hacen las diferentes fuerzas de nuestra localidad hay veces que choca con la (falta de) reciprocidad de los del frente (por las autoridades brasileñas)”.
“Ellos cada vez que piden una colaboración por algún problema, acá automáticamente las autoridades se ponen en movimiento y, de alguna u otra manera, alcanzan resultados positivos, pero a la inversa es un poco diferente”, apuntó el intendente Aquino.
Al hablar de una alternativa que permita mejorar la seguridad en Irigoyen, el jefe comunal apuntó que “estamos buscando que se ponga nuevamente en funcionamiento el Grupo de Operaciones Especiales (GOE) de la policía, que había dado buenos resultados y que ahora puede ayudar bastante”. Así también, ve con buenos ojos que se pueda contar en Bernardo de Irigoyen con la Policía Federal o con un Juzgado Federal, “sería una buena iniciativa para ayudar en todo esto”, afirmó.
Agilizar el paso fronterizo
Por último, apuntó que un avance para desalentar el paso fronterizo por lugares no habilitados sería la eliminación de la burocracia. “Si la gente de Brasil está viniendo a hacer compras nada más, no tendría que estar soportando dos horas de cola como para tratar de pasar. Acá, la gente opta por estacionar sus vehículos a la vera del límite y directamente pasa caminando, lo que va en desmedro de la mayor parte de la población”.
Recomendó que “se debe habilitar una aduana de turismo de compras para evitar el trámite migratorio y aquellos que se van a dirigir a otras partes de la provincia o el país, sí que lo hagan”, recalcó.
Fuente: Norte Misionero.